Cultura

HOMO DEUS, Breve historia del mañana, de Yuval Noah Harari

Cuando tu smartphone te conoce mejor de lo que te conoces a ti mismo

Cuando tu smartphone te conoce mejor de lo que te conoces a ti mismo, ¿seguirás escogiendo tu trabajo, a tu pareja y a tu presidente?

 

Cuando la inteligencia artificial nos saque del mercado laboral, ¿encontrarán los millones de desempleados algún tipo de significado en las drogas o los juegos virtuales?

 

Cuando los cuerpos y los cerebros sean productos de diseño, ¿cederá la selección natural el paso al diseño inteligente?

Tras el éxito internacional de De animales a dioses, con más de un millón de ejemplares vendidos, Harari vuelve su mirada al futuro

El ser humano ha alcanzado un poder sin precedentes y un estatus cuasi divino. Los grandes problemas del pasado, el hambre, las enfermedades y la guerra, ya no controlan nuestras vidas. Somos la única especie en la historia que ha cambiado el planeta por si sola, y ya no podemos culpar de nuestro destino a un ser superior.

Pero ahora que los dioses se retiran y el Homo Sapiens se convierte en Homo Deus ¿qué vamos a hacer con nuestro futuro?, ¿qué proyecto podemos adoptar sin que nuestra especie, y el planeta entero, exceda sus límites y posibilidades?

En esta estimulante obra, el autor de Sapiens Yuval Noah Harari examina las consecuencias de nuestra mejorada condición, desde la insistente búsqueda de prestigio y felicidad al reto permanente de derrotar a la muerte ampliando las fronteras de la ciencia.

Harari explora cómo el Homo Sapiens conquistó el mundo, cómo creó el entorno homocéntrico actual, nuestra situación actual y el futuro posible. Sobre todo, hace las preguntas fundamentales: ¿hacia dónde nos dirigimos ahora? y ¿cómo protegeremos este frágil mundo de nuestra propia capacidad destructora?

EN PALABRAS DEL AUTOR

“Todas las predicciones que salpican este libro no son otra cosa que un intento de analizar los dilemas actuales y una invitación a cambiar el futuro. Predecir que la humanidad intentará conquistar la inmortalidad, la felicidad y la divinidad es muy parecido a predecir que la gente que construya una casa querrá un jardín delante. Parece muy probable, pero una vez que lo verbalizamos, podemos empezar a pensar en alternativas.

A la gente le desconciertan los sueños de inmortalidad y divinidad, no porque suenen tan extraños e improbables, sino porque es insólito ser tan categórico. Pero cuando empiezan a pensar en ello, la mayoría se da cuenta de que en realidad es algo muy lógico. A pesar de la arrogancia tecnológica de estos sueños, desde el punto de vista ideológico no son ninguna novedad. Durante trescientos años, el mundo ha estado dominado por el humanismo, que sacraliza la vida, la felicidad y el poder de Homo sapiens. El intento de conseguir la inmortalidad, la dicha y la divinidad no hace más que llevar los antiguos ideales humanistas a su conclusión lógica. Sitúa abiertamente sobre la mesa lo que durante mucho tiempo hemos mantenido oculto bajo la servilleta.”

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