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LOPEZ OBRADOR TIENE RAZON

Nunca creí escribir esto: López Obrador tiene razón «el poder a los listos los vuelve tontos y a los tontos los vuelve locos». Creí que AMLO era un ejemplo de ese dicho pero no, la ambición por el poder ha multiplicado a los tontos vueltos locos.
Y lo anterior viene a colación con la renuncia de Margarita Zavala al PAN y la soberbia del dirigente nacional del blanquiazul, Ricardo Anaya, ensoberbecido con su tramposo triunfo en elecciones pasadas donde, con la ayuda traicionera de Manlio Fabio Beltrones, se alzó con siete gubernaturas. De la ambición de López Obrador ya es por todos conocida y sobra detallarla.
De aquel PAN que tenía militancia disciplinada y acataba todo lo que su dirigencia disponía nada queda y todo gracias a que tuvieron el poder en sus manos, no lo supieron aprovechar para beneficiar a todos los mexicanos, solo a sus más cercanos, pero si despertaron la codicia en todos sus dirigentes que no solo se han enriquecido ilícitamente sino se muerden, difaman, traicionan, despedazan porque cada uno de ellos cree que es el mejor para conducir este gran país.
Muchos mexicanos todavía recordamos aquel capítulo triste del PRI, cuando la ambición de Elba Esther Gordillo y Roberto Madrazo llevaron al tricolor a la derrota y con ello condenaron a todos a dos sexenios fallidos, donde la mayoría solo recuerda pobreza, muerte, empoderamiento del narco y el enriquecimiento de funcionarios públicos mediocres, de medio pelo que asumieron cargos mediante los cuales se hicieron de enormes fortunas.
Qué equivocado está cada uno de aquellos que creen que los mexicanos queremos ambiciosos, traicioneros, difamadores, mentirosos en el poder. No, señores, señoras, queremos políticos de verdad, con vocación de servir no de servirse. Políticos a quienes les interese el bienestar de todos los mexicanos, sin importar colores, partidos, ideologías, militancias. Que den continuidad a lo bueno que haya hecho el antecesor, no que vengan a imponer políticas absurdas, que vengan a criticar todo lo que se haya hecho pero sin poner en práctica proyectos efectivos.
Los mexicanos no merecemos estos políticos y no los merecemos porque mientras generamos la riqueza de este país con el pago puntual de impuestos, con trabajos mal pagados, con sacrificios para hacerse de un patrimonio, estos remedos de políticos solo buscan llegar al poder para beneficiar a sus amigos, parientes y lamecolas, no para llevar a este país a la grandeza que se merece.
Qué bien que los aspirantes a cualquier cargo público muestren su verdadera personalidad de vulgares ambiciosos por el poder, ahora falta que los votantes no olvidemos estas carnicerías internas en los partidos para a la hora de votar no hacerlo por ellos, pues si entre ellos se despedazan qué podemos esperar los que los mantenemos?  
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