Amamantar reduce el riesgo de presentar cáncer de mamá y ovario
Solo 14.4 por ciento de las mujeres en México, practica la lactancia materna exclusiva los primeros 6 meses de vida del bebé lo que ubica a nuestro país en el penúltimo sitio de Latinoamérica refirió la licenciada en nutrición Griselda López Córdova, integrante del grupo académico Hablemos Claro, quien hizo un llamado a las mamás para que conozcan los grandes beneficios de esta práctica.
“En años recientes –destacó la especialista– en América Latina se ha visto una importante disminución de la lactancia materna. Datos epidemiológicos revelan que la decisión de no amamantar tiene importantes efectos negativos en la salud materno-infantil e incluso se ha asociado a 1.4 millones de muertes y a 10 por ciento de la carga de enfermedades en niños menores de 5 años”.
La causa del abandono de esta práctica en Latinoamérica –explicó la licenciada López Córdova– se debe a diversos factores, algunos de ellos son: que la madre sea trabajadora, poco o nulo apoyo en el ámbito familiar o laboral, escasa educación respecto de los efectos en el organismo del bebé y desconocimiento o empleo inadecuado de las técnicas de lactancia.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los recién nacidos deben recibir lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida para lograr un crecimiento, desarrollo y salud óptimos. Después de ese periodo, el infante podrá recibir alimentos complementarios de acuerdo con su edad.
“Es importante recordarle a todas las madres –y sobre todo a las futuras mamás– que la leche materna es el alimento ideal para el recién nacido porque se adapta a los requerimientos nutrimentales del menor, además esta leche tiene múltiples beneficios para la madre, el niño y la economía familiar”, agregó la nutrióloga integrante del grupo académico Hablemos Claro.
Sobre los beneficios destacables de la leche materna para el bebé apuntó los siguientes:
· Reducción de incidencia y gravedad de enfermedades infecciosas, gastrointestinales y respiratorias. Por ende, una disminución en la morbilidad infantil.
· Reduce el riesgo de presentar asma, alergias, síndrome de muerte súbita, diabetes mellitus tipo II y caries.
· Favorece la confianza en el menor debido a la relación de contacto con la madre, con quien, además, refuerza lazos afectivos.
· La leche materna es de fácil digestión para el organismo neonatal.
En cuanto a los beneficios en la madre, la experta señaló que amamantar reduce el riesgo de presentar cáncer de mamá y ovario. Además favorece la salud mental al mantener a la mujer en un estado de satisfacción tras la realización de la lactancia materna.
Por último mencionó que esta práctica favorece la economía familiar pues se evita la compra de sucedáneos de leche materna: “La lactancia materna es, sin duda, una de las mejores intervenciones sanitarias de menor costo a través de la cual se consiguen efectos positivos en la salud del individuo desde su nacimiento y a lo largo de su vida además de que puede reducir, en gran medida, la morbimortalidad infantil”, concluyó.
