Columnas

Maurice Audin, el deber de la verdad

 

Por Zakie Smeke*

El 13 de septiembre de 2018, Le Monde publicó una noticia por demás interesante por su carácter histórico y político. Emmanuel Macron, Presidente de la República Francesa, reconoció la responsabilidad del Estado francés en relación con la tortura y el crimen que en 1957 ejercieron los militares franceses bajo el paradigma de capturar, torturar y desaparecer durante la ocupación de Argelia.

Maurice Audin, a la edad de 25 años, comunista y militante era un matemático francés brillante que preparaba su tesis doctoral en la Sorbona y enseñaba en la Universidad de Ciencias de Argelia. Arrestado el 11 de junio de 1957 en plena batalla de Argelia, Audin fue torturado y asesinado por la armada francesa; sin dejar huella, desapareció.

Josette Audin, hoy de 87 años, luchó durante 61 años para exigir que se diera a conocer  la verdad sobre la muerte de su marido. El 13 de septiembre de 2018, en compañía de sus hijos, Josette recibió la noticia sobre el reconocimiento de la responsabilidad del Estado francés en la desaparición de su esposo declarada por el jefe del Estado francés. Ella vivió con gran emoción la noticia,  pero  señaló que su lucha aún no termina. Le quedan preguntas sin respuesta, ¿quiénes fueron sus torturadores? ¿dónde quedó el cuerpo de su esposo?

La decisión de Emmanuel Macron es comparable con el reconocimiento de Jacques Chirac (1995) sobre  la responsabilidad del Estado francés en la deportación y redada de personas judías al Velódromo de Invierno (Vel d´Hiv), en agosto de 1942. En ese momento Chirac sostuvo que la redada se realizó bajo una política racista y antisemita. De igual forma, durante la época de la guerra de Argelia, el Estado francés mantuvo una política de dos facetas. Mientras que en Francia se promovía la democracia y la libertad, en Argelia se ejerció el Colonialismo y la violencia sin ética.

Macron utilizó palabras fuertes y cuidadosamente sopesadas para referir el hecho: “La desaparición fue posible por un sistema, que durante la época, autorizaba a las fuerzas del orden a arrestar, detener e interrogar a cualquier “sospechoso”, en el contexto de un lucha más eficaz contra el adversario. Este sistema fue instituido sobre un fundamento legal: los poderes especiales, votado por el Parlamento en 1956. Este sistema constituyó un terreno desafortunado de actos terribles, como la tortura, que el caso de Audin, esclarece.” (https://www.lemonde.fr/idees/article/2018/09/14/torture-en-algerie-salutaire-verite_5354941_3232.html)

El reconocimiento sobre el caso de Maurice Audin representa un avance en la recuperación de la memoria y de la verdad histórica sobre la violencia atroz cometida contra civiles en Argelia desde noviembre de 1954 hasta julio de 1962.

*Doctora en Filosofía Política

Maestría en Periodismo Político

Psicoanalista

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