Columnas

Calentamiento global antropogénico agrava incendios

Por Dr. Alfredo Sandoval Villalbazo

El carácter objetivo de la ciencia permite establecer verdades sobre los fenómenos naturales, más allá de argumentos de autoridad, desinformación y posturas personales. En el caso del problema del calentamiento global, la aplicación del conocimiento científico muestra que el fenómeno es real y que éste ha sido agudizado por la acción humana. Las concentraciones de gases de efecto invernadero se han incrementado de manera significativa a partir de la revolución industrial, lo que a su vez ha causado un aumento de la temperatura global del planeta.

Varios de los efectos del calentamiento global han pasado desapercibidos en amplios sectores de la sociedad. Uno de ellos es la relación existente entre los incendios forestales de gran magnitud y el cambio climático derivado de la acción humana. Aunque a primera vista parecería que los incendios forestales son exclusivamente producto de descuidos o imprudencias circunstanciales, el devenir de incendios como los ocurridos este año en California, Grecia y Suecia depende críticamente del entorno creado por las actividades humanas cotidianas.

El calentamiento global genera temperaturas elevadas y ambientes secos sobre la vegetación y el suelo, facilitando procesos de combustión que favorecen la propagación de los incendios. En el caso de California, el cambio climático acorta la temporada de lluvias, reduciendo niveles de humedad que pudieran inhibir la propagación del fuego. El cambio climático también está modificando la dinámica de los vientos, los cuales avivan incendios forestales particularmente peligrosos en el sur de California.

Adicionalmente, el calentamiento de la atmósfera está desacelerando la corriente de chorro de Norteamérica, lo que lleva a olas de calor frecuentes y a la formación de barreras de alta presión en el Pacífico. Esas barreras inhiben la formación de tormentas que traerían humedad capaz de reducir la propagación de incendios. No es casual que las cifras récord de dióxido de carbono atmosférico, consideradas a partir del inicio de la Revolución Industrial, coincidan con la ocurrencia de incendios forestales extremadamente violentos en distintos puntos de la Tierra.

Es pertinente mencionar que en algunas regiones semiáridas de México los incendios forestales asociados a causas estrictamente naturales, como los rayos derivados de tormentas eléctricas, se han incrementado cerca de un 3% anual durante la última década.

Este tipo de incendios, no atribuibles a negligencia humana, son un indicador de que el cambio en las condiciones ambientales hacia ambientes secos posibilita el desarrollo de fuegos descontrolados de manera poco previsible y potencialmente peligrosa. La falta de control de emisiones de gases de efecto invernadero agravará en el corto plazo los efectos nocivos del calentamiento global, entre ellos la ocurrencia de incendios forestales extremos como los ocurridos en el 2018.

*Académico del Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, e Investigador Nacional Nivel II (SNI).

 

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