México

Las dos caras de la moneda de Morena: Villanueva a su casa, Robles en la cárcel

La secretaria de Gobernación promete poner todo su esfuerzo para que don Mario Villanueva pueda pasar la Navidad en su casa

La frase que se debería apostillar en este gobierno, debería ser aquella que le acreditan a Benito Juárez: «A mis amigos: justicia y gracia; a mis enemigos, justicia a secas», pues en los hechos la Cuarta Transformación ya la lleva al pie de la letra.

Este jueves, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero dio a conocer que en fecha próxima será puesto en libertad el ex gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva Madrid, a petición de senadores de Morena que le enviaron una carta firmada por 40 legisladores de ese partido político, abogando por el ex funcionario quien se encuentra en la cárcel desde hace 18 años, acusado de delincuencia organizada y lavado de dinero.

En la misiva, dirigida al presidente López Obrador, los senadores de Morena le piden otorgar el perdón a Villanueva Madrid, y todo indica que para él si se aplicará la «Justicia y gracia», porque Sánchez Cordero adelantó: «Se le hará llegar el día de mañana esta carta, tenemos reunión de seguridad y por supuesto, cuenten con el menor esfuerzo por parte de la secretaria de Gobernación para llevar a buen término esta acción humanitaria de que don Mario Villanueva pueda, inclusive, pasar la Navidad en su casa, es decir, en prisión domiciliaria».

En la otra cara de la moneda, un Tribunal federal negó la suspensión definitiva a Rosario Robles Berlanga, contra la vinculación a proceso por el delito del ejercicio indebido del servicio público relacionado con la Estafa Maestra.

Los magistrados del Noveno Tribunal Colegiado en materia Penal consideraron que el juez Patricio Leopoldo Vargas Alarcón, titular del Juzgado Décimo de Distrito de Amparo en materia Penal, fundó y motivo las razones por las cuales no era procedente concederle la medida solicitada por Robles Berlanga.

A continuación reproducimos íntegro el texto de Rosario Robles, leído en la audiencia de alegatos aclaratorios, celebrada este jueves 12 de diciembre a las 08:00 horas en la Sala Uno del Centro de Justicia Penal Federal con sede en el reclusorio norte, presidida por la magistrada del Tercer Tribunal Unitario en Material Penal del Primer Circuito, Isabel Cristina Porras Odriozola.

Su Señoría:

Se pueden decir muchas cosas, pero en los dos gobiernos anteriores se puso en marcha una gran Reforma que transformó uno de los pilares del Estado mexicano: el sistema penal. Con una visión republicana se apostó por la consolidación de uno de los tres poderes de la Unión: el judicial. Se apostó por la justicia al pasar de un sistema mixto/inquisitorio a uno PRO-PERSONA, a un Nuevo Sistema Penal Acusatorio cuyos ejes son el respeto irrestricto a los derechos humanos, la presunción de inocencia y el debido proceso.

En 2008 se aprobó esta gran Reforma, cuyo plazo para ponerla en marcha, se cumplió puntualmente el 18 de julio de 2016. Más de 22 mil millones de pesos fueron invertidos para dar este gran paso, por eso es preocupante e indignante que un juez de control cuyo conflicto de interés y animadversión hacia mi persona es evidente, ponga en jaque este enorme esfuerzo.

¿Por qué digo esto? Porque el juez Delgadillo Padierna desestimó completamente el hecho de que me presenté voluntariamente al citatorio judicial, y aun cuando me encontraba en el extranjero, decidí regresar de mi viaje por acudir a la cita. No importa lo que yo estaba haciendo, ni cual fue el motivo de mi viaje, lo relevante es que conociendo el citatorio (mismo que fue entregado en mi domicilio, pero que no recibí personalmente por obvias razones: no me encontraba en México), no busqué pretextos, no me escondí, ni mucho menos aproveché el hecho de que estaba fuera del país para huir.

Esto es lo significativo. Sin embargo, el juez señaló que se había mentido sobre el motivo de mi viaje (cuestión que nunca hice), cuando lo que importa es que yo estuve puntual y de manera voluntaria cuando se me requirió. Violentando todos mis derechos, en la audiencia inicial, y en la segunda motivo de la primera apelación, decretó con base en suposiciones, que no prueba, que existía un grave peligro de fuga por lo que se lesionó mi derecho humano más elemental: mi libertad.

Todo esto a pesar de que le dije que yo veía la vinculación a proceso como una oportunidad para aclarar y demostrar mi inocencia; que era la más interesada en que de manera justa e imparcial un poder independiente tuviera en sus manos la decisión final. ¿Cuáles son sus argumentos? Que no hay certeza sobre mi residencia, a pesar de todos los comprobantes presentados, y sobre todo, a pesar del testimonio de mi hija señalando que nació en el pueblo de los Reyes, Coyoacán; de que ahí vivo y que en esa casa creció hasta llegar a la edad adulta.

¿Cómo puede decir un juez que no tengo arraigo? Tengo una casa en la que he vivido los últimos 25 años y, de manera especial, usted como mujer y como madre sé que me entenderá muy bien: no hay mayor arraigo en un lugar que nuestros hijos. Ellos son nuestra principal raíz.

El juez dijo desde la primera audiencia que yo había mentido pues, según esto, ante la autoridad local tramité una licencia con otra dirección, que el informe de CENAPI era contundente en ese sentido. Lo que pasa es que en ese informe aparece una fake/ licencia, con una dirección que no existe. No hay una sola calle Tennyson en la colonia Axotla, en la alcaldía Álvaro Obregón, y la foto que aparece en el documento es una foto tomada de internet. Yo tengo mi licencia permanente con mi verdadera dirección, que data de 1986. Pero eso no es lo peor, en la audiencia del 22 de octubre, el (mismo) juez dijo que tramité una licencia proporcionando un domicilio en Polanco, de la alcaldía Miguel Hidalgo. Ni siquiera vio la que el MP le presentó. Ahora de manera inusual, ya tengo tres licencias: la mía, que es la verdadera, la falsa del MP y la que inventó el juez.

Así que no somos nosotros los que hemos mentido. En un sistema pro-persona me parece inaudito que el juez diga que estoy en prisión por las falacias de mis abogados y que eso activó los dientes del NSPA. ¿Un juez de control de garantías amedrentando? ¿Castigándome a mí por lo que no le pareció de mis abogados? Incluso dijo que se había demostrado un claro comportamiento negativo de parte mía ¿cómo? ¿Acudiendo a la audiencia? ¿Defendiéndome legítimamente?.

No puede privarme de mi libertad por la actuación de mis abogados. Su actitud entonces siempre fue parcial y cito aquí el interesante estudio de la ONU “Principio de Bangalore de conducta judicial” en el que se señala que la parcialidad de un juez puede manifestarse a través de epítetos, injurias, amenazas, intimidación o actos hostiles”. Todo esto estuvo presente en la audiencia por parte de quien portando una toga tendría que ser absoluta e inequívocamente imparcial.

También dijo que yo tenía recursos suficientes para huir: sus supuestos son los cargos públicos que he ocupado (por cierto el de jefa de Gobierno hace 19 años) y que cuento con una red de poderosos amigos. No tomó en cuenta el congelamiento de mi cuenta (por cierto no por irregularidades en ella sino una vez más por actos de terceros). Tampoco tomó en cuenta que toda mi vida he trabajado porque de eso he vivido; y cuando he tenido la oportunidad de servir a mi país me he conducido con legalidad y con mucho compromiso.

Por lo demás, no existe tal red, pero lo más importante: YO NO QUIERO HUIR, YO QUIERO ENFRENTAR ESTE PROCESO PORQUE SOY INOCENTE. NO QUIERO PRIVILEGIOS, SOLO PISO PAREJO Y JUEGO LIMPIO. EN SÍNTESIS: DEBIDO PROCESO. Su Señoría: La medida cautelar de prisión preventiva violenta mis derechos más elementales: sobre todo mi presunción de inocencia. Se me acusa de ser omisa ante actos de terceros. Lo paradójico es que de estos terceros, los vinculados a proceso, están en libertad como dicta el debido proceso, yo soy la única en la cárcel ¿o cuando se habla de terceros a quién o a quiénes se refieren?. ¿A todo un gobierno? ¿A un sexenio? Soy un trofeo para exhibir un supuesto combate a la corrupción, por cierto corrompiendo las leyes? ¿Es porque soy mujer?

¿Qué sentiría usted si un juez le dijera que le dicta prisión preventiva, porque además en caso de obtener una sentencia condenatoria, el tiempo de reclusión se consideraría para compurgar la pena? ¿No es esto una pena anticipada totalmente contraria al espíritu del NSPA?. Yo respondo con la Constitución en la mano ¿y si soy inocente (como lo soy)? ¿Quién va a reparar el daño causado a mi persona? ¿Quién curará el dolor causado a mi hija, a mi familia, a mis amigos, acaso no existe por eso la presunción de inocencia y el debido proceso.

¿No me protege nuestra Carta Magna y los pactos internacionales firmados por México? Yo lo resumo fácilmente: el juez Delgadillo Padierna ya había tomado una decisión antes de sentarse frente a mí por primera vez. No le importó interponer su interés personal aunque esto significara violentar los principios constitucionales. Acepto sin sopesar la presunción del MP de prisión preventiva (y también de la ASF que creo no tiene facultades para ello), a pesar de que hay medidas cautelares menos lesivas y que garantizan mi presencia en el proceso.

Es totalmente ilegal el hecho de que se me haya decretado esa medida cautelar y se me esté juzgando no por el hecho que se me atribuye, sino por quien soy, por lo que represento como parte del gobierno anterior, y porque algunos de la élite que hoy nos gobierna me guardan rencor y resentimiento y han aprovechado esta oportunidad, utilizando al juez/sobrino como instrumento para su venganza.

Pero yo confío en el Poder Judicial como el dique que tiene la República para contener cualquier tentación de esta naturaleza, para poner barreras ante cualquier intención de utilizar la ley para aniquilar a una adversaria política. Confío en el Poder Judicial porque su herencia es la de Morelos y Juárez, porque mucho nos ha costado que haya un equilibrio de poderes. Cualquier otra perspectiva vulnera al árbitro, al Estado de Derecho, a las instituciones y a la democracia que tanto nos ha costado construir a generaciones de mexicanos.

Muchas gracias

Foto: Archivo

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