Salud y nutrición

Necesario un mayor equilibrio entre médicos generales y familiares con los especializados

La alta especialización de estos profesionales es un problema, pues no coincide con las necesidades del país.

Es necesario redistribuir a los médicos en donde hagan falta, pues están concentrados en las grandes ciudades, incluso trabajan en consultorios anexos a las farmacias, mientras que en pequeñas poblaciones alejadas carecen de sus servicios, afirmó Rubén Argüero Sánchez.

El académico de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM y responsable del primer trasplante de corazón en nuestro país dijo que, «ser médico es un privilegio porque se hace algo en favor de quien lo requiere». Una preocupación del médico y del profesor universitario en el área es «ser congruente con lo que hacemos y lo que decimos», además de ser ejemplo para las futuras generaciones.

El cirujano cardiotorácico dijo que promover la salud, prevenir enfermedades, hacer diagnósticos oportunos, tratamientos eficaces y rehabilitación, son algunos objetivos de la medicina.

No obstante, reconoció la necesidad de tener mayor equilibrio entre los médicos generales y familiares con los especializados, así como dar énfasis a áreas como nefrología y medicina interna, pues son las que más se requieren en México. La alta especialización de los médicos mexicanos es un problema, pues no coincide con nuestras demandas, destacó.

Tecnología, uso y abuso

El académico expuso que la diferencia entre el médico de antaño y el actual es que «antes nos interesaba más lo que llamamos medicina francesa, que implica interrogar al paciente, prestarle atención, imaginar su diagnóstico, y con base en eso solicitar los estudios de gabinete».

Aunque la tecnología en medicina ha servido para tener diagnósticos más precisos, ha deslumbrado a los médicos más jóvenes, que ordenan muchos estudios especializados antes de evaluar al paciente. «Los estudios diagnósticos, especialmente de imagenología, deben servir para confirmar un supuesto diagnóstico o para cambiarlo, así como el tratamiento. Son estudios caros y muy especializados, así que deben ordenarse solamente cuando se necesitan”, opinó.

No se debe abusar de la tecnología médica, pues no siempre es inocua y puede tener efectos adversos en el paciente. “Lo ideal es usar más el criterio clínico antes de invertir en estudios muy sofisticados”.

Respecto a la medicina del siglo XXI, señaló que los objetivos no han cambiado respecto a los últimos dos siglos. “Solamente que ahora contamos con más tecnología e información, pero lo importante es tener siempre como primera consideración al paciente”.

Facultad de Medicina

La de Medicina es una de las facultades más demandadas por los aspirantes a la UNAM. De acuerdo con datos proporcionados por la Secretaría de Servicios Escolares de esta entidad, cada año ingresan en promedio mil 570 alumnos. Una preocupación de la FM es que de sus aulas egresen médicos con las competencias y conocimientos básicos que requiere el país, aplicables a nuestro medio, consideró Argüero.

Foto del doctor Rubén Argüero: UNAM

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