Metropoli

Continúa la comercialización de cigarros electrónicos pese a ser dañinos

Un 2.5 de los jóvenes de entre los 12 y 17 años de edad, han consumido el cigarro electrónico, mientras que sólo el 1.5 por ciento de los adultos lo han hecho.

Pese a que en noviembre de 2019, el diputado Víctor Hugo Lobo Román solicitó, vía el Congreso de la CDMX, a las autoridades de salud federal, prohibir el uso, exhibición y comercialización de los cigarros electrónicos, ya que se demostró que contienen elementos que pueden causar cáncer al fumador activo y pasivo, y eventualmente el riesgo de que estallen estos artefactos, nada ha pasado y se siguen no solo comercializando, sino usando.

El coordinador de los diputados del PRD, indicó que se debe exhortar a las autoridades federales para que difundan a toda la población sobre los riesgos que significa consumir  los cigarros electrónicos  y que en coordinación con las autoridades sanitarias de la ciudad de México  realicen las acciones necesarias para impedir su  promoción y venta, especialmente en tianguis o mercados móviles, establecimientos  mercantiles y zonas escolares.

Lobo Román recordó que algunas personas creen que los cigarros electrónicos  son  productos inofensivos que pueden ayudar a dejar el tabaquismo, pero no saben que contienen elevadas cantidades de  nicotina, sustancia altamente adictiva (un cartucho cuenta con  hasta  5 por ciento de nicotina), además de otros  químicos dañinos  y el líquido componente  puede causar envenenamiento.

El diputado del PRD recordó que los investigadores del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias clasificaron al cigarro electrónico, como un producto  sumamente peligroso  por los componentes  de los líquidos saborizantes, las altas cantidades de nicotina y la manufactura  de un producto electrónico.  “Es considerado por los jóvenes como un “juguete  de moda” sumamente adictivo y peligroso”.

Dijo que aún cuando el tabaquismo es un problema grave en México ya que existen casi 15 millones de fumadores y se estima que anualmente mueren 43 mil personas por enfermedades derivadas del consumos del tabaco,  el cigarro electrónico de ninguna manera representa una alternativa para dejar de fumar y por el contrario es un  producto peligroso, ya que además se venden sin  restricción en el mercado, los saborizantes líquidos  se realizan sin ningún control sanitario y los componentes electrónicos se ensamblan sin ninguna seguridad, por lo que  en cualquier momento pueden estallar.

Lobo Román informó que un 2.5 de los jóvenes  de entre los 12 y 17 años de edad, han consumido el cigarro electrónico, mientras que sólo el 1.5 por ciento  de los adultos  lo han hecho, según  la Encuesta Nacional de Consumo de Alcohol, Tabaco y Drogas.

En este mismo sentido se pronunció el diputado Carlos Hernández Mirón,  quien solicitó a la Comisión Federal  para la Protección Contra Riesgos Sanitarios, (COFEPRIS), y al Servicio de Administración Tributaria (SAT) impedir el ingreso a nuestro país  de los cigarros electrónicos que en su mayoría provienen de China.

De la misma manera  pidió a las 16 alcaldías  de la CDMX a evitar que se comercialice de manera ilegal en la vía pública, espacios abiertos o  mercados sobre ruedas estos productos que carecen de regulación sanitaria.

La Comisión de Salud del Congreso local estimó sumamente  interesantes estas consideraciones y se enfocó  al análisis,  discusión y valoración  de estas iniciativas  y dictaminó exhortar a las autoridades locales y federales  para que realicen las acciones necesarias  para impedir la promoción  y venta de los cigarros electrónicos  especialmente en mercados, tianguis y plazas comerciales.

Foto: Archivo

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