Por Jesús Sánchez Ramírez
Ayer, de nueva cuenta, se dio a conocer el interior del Avión Presidencial TP-01, José María Morelos y Pavón. Lo que se vio, en serio, va más allá de cualquier sueño guajiro. Es un lujo que no se les ha visto ni a los jeques árabes, con todo respeto, verdad. Como se informó desde la semana pasada, ayer la mañanera se ofreció desde el Hangar Presidencial y se informó, nomás de entrada, que hay dos potenciales compradores, uno de los cuales ya habría dado un millón de dólares como apartado.
Este «símbolo de corrupción» fue adquirido en la administración del panista Felipe Calderón, para Enrique Peña Nieto. Y ayer se dieron a conocer varios detalles. López Obrador manifestó que el avión representa los excesos que se cometieron en sexenios pasados, por el que se pagó cerca de 7 mil mdp. Un año de mantenimiento significa aproximadamente 150 mdp, el Hangar costó cerca de mil mdp, para guardar el avión. «Era un gobierno de ricos, para ricos, con un pueblo pobre».
Ya el viernes pasado les comentaba en el Tintero digital de TV Alianza que el otro negocio que tenían proyectado con el nuevo aeropuerto de Texcoco, se cerraría el AICM y se tendría que desmontar el Hangar Presidencial, pues se contemplaba hacer un gran negocio inmobiliario, como Santa Fe, además de que cerrarían la Base Aérea de Santa Lucía, y así lo confirmó ayer el Jefe del Ejecutivo Federal. En la misma conferencia Jorge Mendoza, titular de Banobras, declaró que el Avión Presidencial regresó a México en mejores condiciones que, como se lo entregó la anterior administración.
Se detalló que la aeronave fue fabricada en 2010 y Banobras la adquirió en 2012; cuenta con más de mil 702 horas de vuelo.
Es menester señalar que el avión permaneció 19 meses en EU, supervisado por el fabricante y la Sedena, y los costos de preservación fueron de 1.7 mdd. Por su parte, el titular de la Sedena, Luis Cresensio Sandoval, informó que se realizó un arrendamiento financiero entre la Sedena y Banobras por 15 años, con un costo de 6 mil 94 mdp, de 2012 a 2020 se pagaron más de 2 mil 255 mdp; de 2021 a 2027 se tiene aún pendiente un arrendamiento. Vaya, hasta que se pusieron los puntos sobre las íes.
