Aseguran que a los bares clandestinos y gimnasios ni los molestan, pues creen que ya tienen arreglos económicos con ellos.
«Vivimos tiempo de zopilotes», dijo el presidente López Obrador hace unos meses, y parece que fue la señal que esperaban funcionarios de la Cuarta Transformación para salir a extorsionar a gente trabajadora, como le sucedió a Dalia Dávila, dueña de la tortillería La Abuela, a quien empleados de la Alcaldía Tlalpan amedrentan, hostigan y extorsionan.
Así lo denunció a través de redes sociales, donde narra que tiene su local con razón social La Abuela, ubicado en la calle Tikal de la colonia Héroes de Padierna, en la Alcaldía Tlalpan, y que ante el regreso a clases virtuales, derivado del Covid-19, ayuda a niños que buscan seguir sus estudios, proporcionándoles un lugar en su tortillería.
Esto, al parecer, los malos funcionarios de la Alcaldía Tlalpan, bajo el mando de la alcaldesa morenista, Patricia Elena Aceves Pastrana, lo vieron como una oportunidad de sacar un dinerito vía la extorsión ya que el giro del local es de tortillería.
Al respecto, Dalia Dávila narró en un mensaje difundido en redes sociales: «Me vinieron a amedrentar y a extorsionar estos sujetos, uno se identificó como Juan Pablo Tlatempa Camacho, titular del área de Giros Mercantiles y Espectáculos Públicos en la demarcación; el otro fue un prepotente que no se identificó y mejor se lo llevaron sus compañeros por el tono tan agresivo que usó para dirigirse a mi, pidiendo y exigiendo de una forma intolerante y agresiva un giro que no tenemos», dijo Dalia Dávila.
Destacó que en su local si existen las medidas necesarias para evitar contagios de Covid-19, «es falso que no existan los protocolos necesarios, como argumentan estos empleados».
Enfatizó: «Nosotros no perseguimos ningún cobro, nosotros no estamos abiertos al público, nosotros tenemos nuestra cinta que claramente dice PROHIBIDO EL PASO, nosotros lo único que buscamos es el bien y salir de está pandemia que está arrasando con el mundo entero. Nosotros regalamos caretas, cubre bocas, gel antibacterial, sanitizante, nosotros damos desayunos totalmente gratis, despensas, tortillas, ropa, útiles escolares, nosotros ayudamos a nuestros hermanos en desventaja, nosotros somos la Gran Familia #TodosPorLeo».
Acusó que, «intentan extorsionarme mientras los bares clandestinos, gimnasios entre otros no tienen ni el más mínimo cuidado y mucho menos llevan un protocolo de seguridad sanitaria, y perciben ingresos y ellos si están abiertos al público».
Las extorsiones a la orden del día
Luego de la denuncia pública de Dalia, poco a poco se han ido sumando otras, como la de Claudia Romero, quien es propietaria de una estética en la misma zona, y denunció ser víctima de extorsión por parte del mismo empleado Juan Pablo Tlatempa Camacho, «quien dice ser intocable, y como sicario del narco pasa a exigirnos dinero», dijo. Aseguran que este empleado, les pide dinero o los amenaza con cerrar sus negocios vía la clausura.
Los comerciantes le envían un mensaje a la alcaldesa morenista, Patricia Elena Aceves Pastrana, «Ya basta de exigirnos dinero, lo que el pueblo desea es trabajar, somos gente honesta, humilde y honrada, deseamos vivir tranquilamente. Señora alcaldesa, le exigimos que haga algo al respecto. Nosotros, señora alcaldesa, le dimos nuestro apoyo y voto de confianza.
Es su deber velar por la ciudadanía, por las personas que tenemos pequeños negocios, la invitamos señora alcaldesa a que nos visite en la colonia Héroes de Padierna y usted misma se cerciore de las extorsiones y amenazas por parte del Juan Pablo Tlatempa Camacho ¿o es que usted solapa y es cómplice?»
Foto: Especial
