Es la tercera ocasión en que este sujeto se ve involucrado en casos similares.
Texto y foto: Iván Castillo R.
Corresponsal
OAXACA, Oax.- Demasiado empoderados se sienten los llamados Servidores de la Nación, pues mientras unos no respetan el cargo, otros golpean a ciudadanos por preguntarles cuáles es su labor, sobre todo en estos tiempos electorales.
Manejaba ebrio y estuvo a punto de atropellar a varias personas
Luego de dañar un vehículo oficial de la dependencia en la que labora, y de estar a punto de atropellar a varias personas por manejar en estado de ebriedad, Gabino Ortiz, delegado de Bienestar en Tlaxiaco, Oaxaca, fue detenido. Esta es la tercera ocasión en que este empleado público se ve involucrado en casos similares.
El funcionario estuvo a punto de atropellar a varias personas, cuando circulaba por calles del Barrio de San Sebastián, en Tlaxiaco, a bordo de un vehículo perteneciente a la dependencia en la que labora.
El vehículo que manejaba el funcionario de la nación detuvo su carrera al chocar con una zanja. Al lugar arribaron policías municipales para apoyar al delegado, y ponerlo a disposición de las autoridades competentes.
El delegado de Bienestar fue trasladado a los separos de la Policía Municipal. Con este evento sería la tercera ocasión en que el servidor de la Nación está involucrado en casos similares. En enero de 2020, se vio involucrado en un accidente vial y seis meses después estuvo a punto de atropellar a un menor de edad.
Empleado de MORENA golpea a ciudadano
A través de redes sociales se difundió un video, donde se observa a un empleado de MORENA, hablando con una señora de edad, por lo que un ciudadano se acerca para preguntarle a la adulta qué es lo que el «Servidor de la nación» le estaba preguntando.
El morenista no dio tiempo a la señora para que contestara pues se adelantó y dijo «sólo le estoy dando información de lo que ha hecho el presidente», para de inmediato lanzarle un golpe al ciudadano que lo hizo tirar su teléfono celular.
Al parecer el celular cayó cerca de donde estaba la señora, quien lo levantó y les decía «no se peleen». Esto ya no es novedad, sobre todo ahora, en «tiempos de zopilotes».
