Es importante trabajar en la protección y defensa de los derechos de los usuarios del transporte público, quienes como consumidores reciben el servicio de entes privados concesionados, dijo Laura Ballesteros Mancilla, subsecretaria de Planeación de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México (Semovi) en la Universidad Iberoamericana.
En entrevista, luego de presentar el libro Caminando hacia el futuro. Experiencia de movilidad en la Ciudad de México, cuya edición coordinaron ella y Fernando Dvorak, Ballesteros abundó que además de limpio, seguro, rápido y eficaz, el transporte público debe ser de calidad, llevar a su destino a los ciudadanos, estar conectado con los centros de trabajo y de vivienda, y ser multimodal.
“Y que también podamos tener un sistema compartido de operación. Si las operaciones se comparten, entonces la ciudad puede proveerle a la gente rutas, horarios, frecuencias, mapas, y entonces la utilidad para el traslado de cada quien se incrementa”, añadió la exlegisladora, quien a.
En una breve reseña sobre la obra, la doctora Gabriela Lee Alardín, coordinadora de la Maestría en Proyectos para el Desarrollo Urbano de la Ibero, comentó que el libro tiene como objetivo analizar y recopilar las experiencias más relevantes en materia de movilidad en la Cdmx en los últimos años.
Plantea el reconocimiento y la defensa del derecho de los ciudadanos a la movilidad, y retomar ésta dentro de la agenda urbana de las ciudades, para ver cómo el tema se convierte en un referente y en la llave para hacer efectivos otro tipo de derechos, como el derecho a la salud, al trabajo y a la vivienda digna.
El texto considera la generación de políticas públicas que sean capaces de solventar las necesidades de todos los ciudadanos, la generación de reglas y marcos jurídicos que lleven a ejercer un gasto público que reconozca los derechos humanos, civiles y sociales, y también plantea una serie de retos que buscan un cambio profundo en la planeación y la restructura en materia de movilidad, de agenda urbana y de derechos sociales.
Hay rezagos, pese a Ley de Movilidad
Asimismo, la académica reconoció que en la actualidad es un plus tener definidos los derechos para la movilidad ciclista y la movilidad de peatones (con la aprobación en 2014 de la Ley de Movilidad efectuada por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal), “pero resulta evidente que en la Ciudad de México estamos todavía muy atrasados en infraestructura para estas modalidades”.
Consideró también que hay un rezago en la señalización vial, que estamos viviendo cotidianamente, por lo que destacó la necesidad de contar con señalamientos para que la Ley de Movilidad se pueda aplicar correctamente y todos los ciudadanos puedan acatarla.
La doctora Carolyn Aguilar Dubose, directora del Departamento de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana, calificó de encomiable el esfuerzo hecho en la Cdmx en el tema de movilidad, que se refleja en contar ya con una ley y una secretaría.
Sin embargo, se dijo preocupada porque se vea a la movilidad como algo sectorial; cuando se debe contemplar como algo que se debe integrar a cuestiones de desarrollo urbano. Por ejemplo, que las ciudades sean más compactas, lo que implica redensificar; más complejas, para lo que se requiere mezclar los usos de suelo; y que el espacio público ofrezca la posibilidad de flujos de vehículos y de personas.
Destacó la importancia de ir de un lugar a otro, pero ese camino que une el origen con el destino debe ser saludable y brindar bienestar, lo que implica un gran esfuerzo en el diseño de las calles y el espacio público.
“Por el otro lado también tenemos esta necesidad de integrar no nada más al desarrollo urbano, sino también a la parte relacionada con el cuidado del medio ambiente, con el cuidado del patrimonio; de áreas que deben ser protegidas y que de alguna manera la movilidad puede vulnerar”.
La de Ballesteros Mancilla fue la segunda ponencia del ciclo de conferencias «¿Smart cities? Herramientas para optimizar las dinámicas urbanas», organizado por el Departamento de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, por medio de su Maestría en Proyectos para el Desarrollo Urbano (MPDU).
Smart cities
Para nombrar su ciclo de ponencias la MPDU adoptó el término de SMART CITY, o ciudad inteligente, ya que éste se refiere a un tipo de desarrollo urbano que aplica las tecnologías de la información y la comunicación para proveer infraestructuras y sistemas que contribuyan a lograr un desarrollo sostenible y a mejorar la calidad de vida de las personas en aspectos operativos, sociales, económicos y ambientales.
Con su ciclo de conferencias: ¿SMART CITIES? Herramientas para optimizar las dinámicas urbanas, la maestría de la IBERO busca aportar elementos para ampliar la noción de Smart Cities, y presentar herramientas que pudieran responder adecuadamente a las necesidades básicas de instituciones, empresas, y los propios habitantes.
Pedro Rendón