Por Patricia Carrasco
Desde que se supo el nombramiento de Miguel Basáñez Ebergenyi, como embajador de México en Estados Unidos, en agosto del 2015, vinieron las críticas de los especialistas en política exterior porque no tenía experiencia en esa materia, ni contaba con el perfil para ocupar esa importantísima embajada. Otros dijeron que ese designación se debía a que era una persona cercana al círculo presidencial; ¿Cuál sería la realidad?. Pero lo cierto es que sólo estuvo en el cargo poco más de 7 meses. Y ahora Carlos Manuel Sada Solana será el próximo embajador de México en Estados Unidos de América, falta esperar que su nominación sea enviada al gobierno norteamericano para su beneplácito y se someterá a la consideración del Senado de la República para su ratificación.
Claro que Basáñez no es ningún político improvisado tiene experiencia en imagen opinión pública, fue pionero en la realización de encuestas y de 1999 al 2000 fue presiente de la Asociación Mundial de Investigación en Opinión Pública; es académico, abogado, cuenta con una maestría en administración pública por la Universidad de Warwick de Reino Unido y un doctorado en Ciencias Políticas en London School of Economics. También trabajó como procurador de Justicia del Estado de México cuando Alfredo del Mazo era gobernador y después fue su secretario particular en la Secretaría de Energía. Pero como muchos políticos designados a las mejores embajadas, no forma parte del servicio exterior mexicano, no es un diplomático de carrera.
En agosto del 2015, cuando fue su nombramiento, la cancillería mexicana informó que la prioridad del gobierno es consolidar una visión de la frontera México-EU como una región de prosperidad, tarea encomendada al Dr. Basáñez”. Por cierto, cuando Eduardo Medina Mora dejó el cargo como embajador de México en EU en marzo pasado, por 5 meses no se nombró embajador mexicano en EU.
Ahora que designan a Carlos Sada, actual Cónsul General de México en Los Ángeles, como el nuevo embajador mexicano ante el vecino país del norte, se argumenta que el cambio se debe a una estrategia para fortalecer la red consular en ese país, ante escenarios adversos.
«Le tengo un amplio reconocimiento a nuestro Embajador Basáñez, no es una destitución propiamente, sino una remoción en razón de darle fortalecimiento a alguien con una experiencia sobre todo en el trabajo consular, donde está nuestra atención a connacionales y que queremos fortalecer, apoyar, respaldar para enfrentar de mejor manera este escenario, escenarios que pueden verse como adversos», afirmó el mandatario mexicano.
El nuevo embajador Sada es un experto en cuestiones de migrantes. Si bien no es integrante del Servicio Exterior Mexicano, ha servido al gobierno mexicano desde 1989 particularmente en los consulados de México en Estados Unidos. También fue cónsul general en Nueva York, en el Consulado de Chicago en San Antonio, así como cónsul general de México en Toronto, Canadá.
Muchos de los reproches que llovieron para el ex embajador fue su pasividad frente a las duras críticas que realizó y realiza el precandidato republicano Donald Trump hacia los mexicanos.
Ya son muchos los cambios que ha que realizado la titular de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu Salinas, esperemos que para bien. Lo cierto es que revela la decisión de ajustar estrategias en política exterior, que a decir de los investigadores en la materia, tiene muchos “asegunes”.
Sada Solana tiene gran experiencia en los consulados antes mencionados es conocido por la comunidad mexicana.
Y tampoco se debe olvidar, que horas antes del nombramiento, el polémico Donald Trump, exhibió su forma de extorsionar a México para que pague la construcción del muro fronterizo: confiscar las remesas.
