La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) informa que de acuerdo a estudios preliminares, las posibles causas del varamiento de un total de 84 tortugas y un delfín que aparecieron muertas en costas del estado de Jalisco, entre los pasados días 8 y 15 de abril, pudo deberse a la ingesta de toxinas en algas marinas.
La investigación estuvo a cargo de manera independiente por el Centro Interdisciplinario de investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) Unidad Sinaloa, a través de su Laboratorio de Vida Silvestre y Enfermedades Emergentes.
La Delegación Federal de la PROFEPA en la entidad puso en marcha la Red de Varamientos de Ejemplares Marinos a partir del primer reporte de la aparición de los primeros animales muertos, en las distintas playas de la costa de Nuevo Vallarta.
Como parte de las investigaciones preliminares el CIIDIR-IPN se realizó la necropsia a 2 ejemplares de Tortuga Negra (chelonia agassizii), a los cuales se encontraron evidencias de asfixia por inmersión y un alto contenido de organismos gelatinosos en el estómago principalmente salpas.
De acuerdo a los estudios de laboratorio, las especies encontradas en los intestinos de ambas tortugas, pertenecen al grupo de los tunicados de la clase thaliacea, las cuales son animales trasparentes de forma tubular y consistencia gelatinosa que se alimentan de fitoplancton, filtrando el agua de mar.
Las primeras impresiones de las necropsias arrojaron que el alto contenido estomacal de salpas pudo causar la muerte de los organismos. El equipo de trabajo estuvo coordinado por investigadores del IPN-CIIDIR Sinaloa y participaron también colaboradores locales, y miembros de la Red Tortuguera A.C.
Las muestras del tejido orgánico se analizan en el Laboratorio de Vida Silvestre y Enfermedades Emergentes, donde se busca determinar si la presencia de especies de fitoplancton pudo provocar algún florecimiento algal masivo que pudiera estar afectando a las tortugas marinas y otros especímenes qué se alimenten de dicho fotoplancton directa o indirectamente (como los delfines), en esas costas.
Esta Procuraduría informa que entre el 08 y el 15 de abril se atendió el hallazgo de 84 cadáveres de tortugas marinas y 4 tortugas vivas, además de un delfín, todos varados en la costa de Puerto Vallarta, Jalisco, tras reportes iniciales de prestadores de servicios turísticos quienes avistaron algunos cuerpos de quelonios flotando en el mar.
A partir de los reportes, en coordinación con la Secretaría de Marina (SEMAR), el Departamento de Ecología, Protección Civil y Bomberos del Ayuntamiento del municipio de Puerto Vallarta, el Centro Universitario de la Costa, la CONANP, investigadores del IPN-CIIDIR Sinaloa y la empresa Vallarta Adventure, llevaron a cabo la verificación del evento mediante recorridos en playas y mar.
Las citadas necropsias se practicaron a 2 ejemplares de tortugas negras (chelonia agassizii) subadultas, de aproximadamente 30 kg. de peso.
Éstas se encontraban en avanzado estado de descomposición, pero a pesar de eso, en ambos ejemplares se pudo observar que presentaban una buena condición corporal (suficiente presencia de grasa y tejido muscular). No se observaron golpes o marcas que evidenciaran interacción con artes de pesca.
El pasado jueves 14 de abril, el grupo de especialistas realizó un recorrido por la zona marina de Bahía de Banderas donde se constató la presencia de medusas y otros organismos gelatinosos, principalmente Salpas, por lo que se colectaron algunos de estos organismos de manera manual para su análisis.
Adicionalmente se colectaron muestras de agua para la identificación de las especies de fitoplancton en el IPN-CIIDIR Sinaloa.
Durante ese recorrido, observaron 4 tortugas marinas de la especie golfina (lepidochelysolivacea), que presentaban comportamiento errático.
Se pudo capturar a 2 de estos ejemplares y fueron trasladados a las instalaciones del delfinario de Vallarta Adventure, donde se tuvieron en observación; en dicho lugar se les tomaron muestras sanguíneas, lavado estomacal y muestra de copro, para posteriormente ser liberadas.
La vigilancia se mantendrá y se exhortó a la ciudadanía para que reporten cualquier clase de incidencia relacionada con la fauna marina en la zona.