Cultura

Última voluntad de José Luis Cuevas: que sus hijas y su hermano Alberto no estuvieran en su funeral

Denunció las anomalías del apoderado legal de la Fundación José Luis Cuevas y Novelo AC respecto a la información financiera

La última voluntad de José Luis Cuevas fue que sus hijas y su hermano Alberto no estuvieran presentes en los servicios fúnebres, toda vez que quería evitar un escándalo. «También pidió ser incinerado y que sus cenizas me fueran entregadas».

Así lo señaló Beatriz del Carmen Bazán, viuda del artista, en conferencia de prensa en la que también se deslindó de la administración y manejo del Museo José Luis Cuevas, y aclaró que ella no tienen ningún problema legal y que el museo es responsabilidad de la Fundación José Luis Cuevas Novelo A.C.

A casi 8 meses de la muerte del pintor, escultor y escritor mexicano José Luis Cuevas Novelo, y de tantos dimes y diretes, Beatriz del Carmen Bazán viuda de Cuevas se atrevió a hablar e hizo fuertes declaraciones sobre su vida con el artista y con sus hijas, y además presentó documentos legales y médicos certificados ante notario público, en donde dio a conocer la última voluntad de su esposo.

En reunión con representantes de diversos medios de comunicación realizada en la casa del pintor, Carmen Bazán viuda de Cuevas estuvo acompañada de sus abogados: Katya Mardueño y el penalista Ricardo Olmedo Gaxiola, donde declaró que las señoras Mariana, Ximena y María José Cuevas han ensuciado su imagen y la de su esposo, con notas sensacionalistas y amarillistas que han publicado algunos medios, principalmente revistas de espectáculos.

Enfatizó que no fue amante del artista, «ni destruí un hogar o una familia. Su primera esposa Bertha Lilia Riestra Menchaca falleció en el año 2000. Yo conocí a José Luis en el 2001, y una vez divorciada acepté el noviazgo en diciembre de 2002. Un año después nos casamos por lo civil y en el 2006 por la Iglesia católica”.

Afirmó, que José Luis Cuevas nunca estuvo secuestrado ni física ni mentalmente como repetidamente han declarado sus hijas y otras personalidades del mundo artístico e intelectual.

Bazán de Cuevas aseguró que no hay más herencia que repartir, en vida del artista, y por consejo de ella, heredó a sus tres hijas, con la condición de conservar la casa-estudio de Galeana en la Ciudad de México; «a las tres les cedió propiedades y obras de arte, lo que generó problemas entre ellas, en especial con Mariana, por incluir a sus hijos».

Dijo que el estado de ánimo y la salud de José Luis empezaron a decaer cuando falleció su amigo contemporáneo, el escritor mexicano Carlos Fuentes en el 2012; desde ese momento sus miedos por la muerte, que siempre estuvieron presentes, así como por la vejez, se volvieron más severos. “Entró en una gran depresión, decidí buscar la ayuda de especialistas.”

Manifestó que la salud del artista empezó a deteriorarse en el 2013, por una infección en las vías urinarias, por el cual fue internado. “Esto causó un gran problema con las hijas, ya que ellas declararon falsamente que yo tenía a José Luis, secuestrado, abandonado y enfermo”.

A raíz de esa polémica hospitalización, dijo, José Luis Cuevas convocó a una conferencia de prensa en donde se le vio lúcido, fuerte y sonriente, y ahí anunció el rompimiento con sus tres hijas y su hermano Alberto.

Confesó que, a partir de ese momento, los ataques por parte de Mariana, Ximena y María José en los medios informativos tuvieron dos frentes legales: uno penal, donde Carmen Bazán fue denunciada ante la Procuraduría General de Justicia capitalina, por la supuesta comisión de homicidio en grado de tentativa, secuestro y abandono de adulto mayor. «La misma autoridad determinó que los hechos narrados fueron falsos y la existencia de posibles conductas delictivas carecieron de pruebas», aclaró.

Y la segunda denuncia fue por la vía familiar, en donde se le demandó el establecimiento urgente de un régimen de visitas entre el artista y sus tres hijas.  «La demanda concluyó con un auto dictado el 8 de julio de 2013, por el juez décimo tercero de lo familiar, quien resolvió decretar sin materia el asunto, ordenando que, al ser José Luis una persona lúcida y capaz, estaba en aptitud de tomar sus propias decisiones, y él decidió no ver más a sus hijas». 

La viuda explicó que, a partir de 2016, “José Luis empezó a presentar fiebres intermitentes, aparentemente sin ninguna causa”; después de practicarle algunos estudios y una cirugía, se le detectó cáncer de colon. Y dijo que el propio artista tomó la decisión de someterse a quimioterapia, y también determinó suspenderla al sentirse muy incómodo por sus efectos secundarios.

Carmen Bazán mencionó que las complicaciones de la enfermedad regresaron con fiebre, por lo que decidió llevarlo al hospital, donde los estudios detectaron metástasis en otros órganos. «Posteriormente a José Luis se le volvió a internar en varias ocasiones, y la última vez fue el viernes 30 de junio, falleciendo el lunes 3 de julio del presente año».

Hizo hincapié sobre los documentos de peritos forenses en psiquiatría que entrevistaban a José Luis periódicamente para checar sus estados de salud mental y físico, todos ratificados ante notario público y que están a la disposición de los medios de comunicación.

Otro de los temas importantes que tocó la viuda, fue el registro del nombre y firma “José Luis Cuevas” como marca, señaló que se hizo en el 2012, porque se detectó exceso de piratería entorno a su obra y para proteger la originalidad de la misma; por lo que se suscribió un convenio, en donde el artista la dejó como propietaria de la misma cuando él falleciera

Sobre su funeral, la viuda reveló que, ella solamente acató las instrucciones del maestro Cuevas, de que en su velorio, cremación y homenaje no estuvieran presentes sus hijas Mariana, Ximena y María José, así como su hermano Alberto, para prevenir el escándalo, que a final de cuentas protagonizaron y con las consecuencias negativas en su contra.

También denunció las anomalías del apoderado legal de la ‘Fundación José Luis Cuevas y Novelo A.C., respecto a la información financiera, aseveró que, a pesar de tener el carácter de Directora y su esposo, ser el artista por el cual el Museo lleva su nombre, siempre los mantuvo al margen.  

Señaló que estas irregularidades fueron oportunamente informadas a las diversas autoridades culturales de nuestro país, que incluso se le externó a la directora del INBA, doctora Lidia Camacho, el deseo de José Luis de suprimir su nombre de la denominación social de la fundación y se le plantearon diversas alternativas para una nueva y transparente administración, y que hasta este momento el INBA no ha hecho nada.

Asimismo, desmintió las falsas declaraciones de Ximena Cuevas respecto a la venta de Obra Erótica que está ofreciendo la Galería Óscar Román; dijo que los dibujos, su esposo en vida se los dio al galerista para su venta -hace aproximadamente año y medio-, y negó que formen parte del acervo del Museo José Luis Cuevas.

Carmen Bazán informo que la obra de José Luis se encuentra en diversas galerías públicas y privadas de México y del mundo, y está a la venta como la de cualquier artista que vive de su trabajo, y reveló que Mariana, Ximena y María José Cuevas han vendido muchas obras de su esposo.

La viuda también agradeció los homenajes de que ha sido objeto el Maestro José Luis Cuevas en museos, consulados, embajadas e instituciones como el Hospicio Cabañas de Guadalajara, Jalisco, que albergó la exposición itinerante “Por siempre Cuevas. Homenaje Póstumo”, y que ahora se encuentra en el Museo Iconográfico del Quijote en la Capital de Guanajuato.

Para finalizar, Beatriz del Carmen Bazán viuda de Cuevas expresó que ha actuado con mucha prudencia, decencia y respeto ante los ataques de Mariana, Ximena y María José, y de algunos medios de espectáculos; pero en caso de que las agresiones informativas continúen, no dudará en entablar las acciones legales correspondientes en contra de quien resulte responsable.

 Foto: UNAM

Arriba