Un total de 2 mil 340 bienes inmuebles y 5 mil 789 bienes muebles en 11 estados de la República fueron afectados cifras a las que ninguna nación se había enfrentado a lo largo de los siglos
A un año de que los sismos de septiembre de 2017 nuestro patrimonio cultural sufrió una de las más grandes afectaciones en su historia. Los mexicanos afrontamos uno de los mayores retos: salvaguardar, intervenir, restaurar y rescatar los bienes arquitectónicos y artísticos que han sido testigo del acontecer nacional, joyas emblemáticas de nuestra identidad.
Así lo señaló la Secretaría de Cultura del Gobierno de la República, y con orgullo anuncia que México recupera su esplendor con la restauración en su totalidad de 450 inmuebles y 41 zonas arqueológicas.
Y es que, un total de 2 mil 340 bienes inmuebles y 5 mil 789 bienes muebles en 11 estados de la República fueron afectados, cifras a las que ninguna nación se había enfrentado a lo largo de los siglos.
La mayor parte de los inmuebles afectados fueron templos, conventos y capillas del periodo virreinal y del siglo XIX; también obras de arquitectura vernácula, bienes con valor artístico, museos y zonas arqueológicas, de los cuales 431 registraron daños severos, mil 19 moderados y 890 con daños menores.
Bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO como el Centro Histórico de Xochimilco y el de ciudades como la de México, Puebla y Oaxaca, así como el conjunto de 14 monasterios franciscanos en las faldas del Volcán Popocatépetl, resultaron con daños diversos.
De los 5 mil 789 bienes muebles afectados, fueron en su mayoría pinturas murales, campanas, retablos, órganos, mobiliario histórico, pinturas de caballete, vitrales, portones, decoraciones de argamasa, yeserías y elementos escultóricos en fachadas.
La Secretaría de Cultura, encabezada por María Cristina García Cepeda, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, han actuado en coordinación con todos los niveles de gobierno, con instituciones académicas, asociaciones religiosas, grupos comunitarios, organismos privados e instancias internacionales en la identificación y diagnóstico de los daños, así como en la planeación de la recuperación total del patrimonio, en las 11 entidades de la República.
De manera inmediata, el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto y la secretaria de Cultura realizaron diversas giras de supervisión en las entidades afectadas. Acompañados por el titular del INAH, Diego Prieto, se escucharon las voces de las y los habitantes de las comunidades, las de gobernadores, presidentes municipales, sacerdotes y mayordomos, quienes han participado en las tareas de rescate y recuperación.
Se definió un Plan Maestro para la magna tarea de restauración de los bienes muebles e inmuebles y se determinó el esquema de financiamiento para la recuperación de los bienes afectados.
Se levantó un censo de los daños, a través de los Centros INAH en los estados, al tiempo que 48 brigadas con mil 100 especialistas recorrieron comunidades y municipios para verificar las afectaciones; con recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), se tomaron medidas inmediatas para la seguridad de las personas y la prevención de mayores daños.
Se gestionaron los recursos de la Póliza del Seguro (Banorte) contratado por el INAH y se visitaron más de 2 mil 500 inmuebles con ajustadores para certificar los daños. Paralelamente, se lanzó la convocatoria “Intégrate a la restauración del patrimonio cultural” con el objetivo de sumar a estudiantes, profesionistas, académicos y universidades a los trabajos de recuperación.
Se conformó un Comité Técnico-Científico para analizar los problemas de mayor complejidad técnica y, simultáneamente se integró un Comité Ciudadano, conformado por reconocidos miembros de la sociedad civil para dar continuidad y transparencia al proceso de restauración.
Como parte del Plan Maestro, en la Primera Fase (de octubre 2017 a marzo de 2018), se realizaron acciones emergentes de apuntalamiento y salvaguarda, ponderación de los daños, consecución del esquema de financiamiento y la conclusión de los primeros trabajos de restauración.
En la Segunda Fase (de abril a noviembre de 2018), se han asignado los fondos a la totalidad de los trabajos; las propuestas de intervención para todos los inmuebles, la elaboración de proyectos de mayor complejidad y la conclusión de los trabajos menores y parte de los moderados. Para la Tercera Fase (de diciembre 2018 a diciembre 2020), se concluirán los trabajos de restauración.
En todas las fases del Plan Maestro, se ha tenido el cuidado de informar y hacer partícipe a los miembros de las comunidades afectadas, de los procesos que conducirán a la recuperación total del patrimonio cultural, con la participación de arqueólogos, antropólogos, historiadores, arquitectos y restauradores, que han interactuado constantemente con las organizaciones comunitarias.
De los 50 inmuebles del país, declarados Monumento Artístico, únicamente siete requirieron acciones de restauración: el Antiguo Palacio Postal sufrió desprendimiento de acabados en fachadas que ya fueron reparadas. En el Banco de México, en su fachada posterior, sobre el Callejón de la Condesa, se observó el desprendimiento parcial en un fragmento de la cornisa y los acabados de cantera.
En la Secretaría de Salud, el INBA realizó visitas técnicas y se autorizaron trabajos para reparar las fuentes debido a que, con los sismos, se generaron filtraciones, mientras que en el Monumento a la Revolución se intervinieron afectaciones menores como el desprendimiento de materiales en algunas juntas.
El Museo Nacional de Arte tuvo daños moderados como el desprendimiento de un pináculo del remate central en la fachada, así como de materiales y algunas fisuras en muros interiores; mientras que la Columna de la Independencia presentó desplazamientos en sillares del fuste y algunas grietas interiores por torsión en el cilindro metálico. El Instituto de Ingeniería de la UNAM revisa actualmente un proyecto de rehabilitación y restauración que cuenta con la atención del Fonden y la supervisión del INBA.
Desde 1985, el Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam) del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) ha venido atendiendo los murales del Conjunto SCOP de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). En lo referente a la afectación producto de los sismos de septiembre de 2017 del mismo Conjunto SCOP, así como de su obra artística asociada, las áreas técnicas del INBA (Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble y el Cencropam han recibido, desde febrero de 2018 hasta la fecha, diversos envíos relacionados con el eventual desmontaje y resguardo de la obra mural que decora sus fachadas. El INBA, atendiendo su competencia, les ha dado respuesta una vez analizados.
Como resultado de lo anterior, el Instituto propuso llevar a cabo una mesa interdisciplinaria e interinstitucional, misma que la SCT aceptó. El próximo lunes se llevará a cabo con la participación de SCT, INBA, la Dirección de Patrimonio Cultural Urbano de Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda del Gobierno de la CDMX y la Delegación Benito Juárez.
Algunas acciones realizadas en los estados son:
En el estado de Chiapas se supervisaron los trabajos en el Templo de Santa Lucía, en San Cristóbal de las Casas; acciones de aseguramiento en el Museo de la Ciudad de San Cristóbal, así como la intervención del Ex Convento de Santo Domingo y del templo de San Lorenzo en la comunidad de Zinacantán, esta última, muestra patente de solidaridad de sus habitantes, pues la comunidad tzotzil aseguró de inmediato su patrimonio litúrgico después de los sismos.
En Puebla, una de las entidades más afectadas por los sismos del mes de septiembre, se han evaluado, asegurado e intervenido diversos recintos como el templo de Nuestra Señora de los Gozos que se ubica en el Centro Histórico y que ha sido restaurado en 95 por ciento. Asimismo, la parroquia de San Sebastián Mártir, una de las más antiguas en esa entidad, sufrió grietas en los arcos, cúpulas y bóvedas, por lo que los especialistas tuvieron que intervenir las linternillas y consolidar muros agrietados. Actualmente se encuentra restaurada en su totalidad.
El Templo y Convento de la Merced, fundado en 1612 por la orden Mercedaria en el Centro Histórico poblano, requirió una intervención mayor, que implicó labores de contención y especialistas en arquitectura, pintura y yesería, además del uso de materiales originales que comienzan a devolverle su esplendor al emblemático recinto.
En el barrio de Tianguisnahuatl, en San Pedro Cholula, se encuentra el Templo de San Miguel, restaurado al 90 por ciento después de sufrir daños en la torre del campanario que sufrió un colapso.
En relación con los bienes muebles de valor artístico, cabe destacar que especialistas del INBA llevaron a cabo la revisión de 682 obras murales localizadas en 76 sitios de la Ciudad de México, así como en el Estado de México, Tlaxcala, Morelos, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
La mayoría de los murales con valor artístico no sufrieron daños graves; en algunos casos se registraron fisuras que no pusieron en riesgo la estabilidad de la obra y que ya fueron atendidas por especialistas del INBA, entre ellos destacan: Epopeya del pueblo mexicano, de Diego Rivera (Palacio Nacional); Por una seguridad completa y al servicio de todos los mexicanos, de David Alfaro Siqueiros; y El pueblo en demanda de salud, de Diego Rivera (Centro Médico Nacional La Raza); Murales de la Capilla Riveriana (Universidad Autónoma de Chapingo); El árbol del conocimiento, realizado por Roberto Montenegro en el actual Museo de las Constituciones; mural Retrato de la burguesía, de David Alfaro Siqueiros, en el Sindicato Mexicano de Electricistas; murales de José Clemente Orozco y George Biddle en la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
También se han atendido con trabajos de velados preventivos los murales Historia de Morelos, Conquista y Revolución, de Diego Rivera (Museo Regional Cuauhnáhuac, Morelos); La historia de Tlaxcala y su contribución a lo mexicano, de Desiderio Hernández Xochitiotzin (Palacio de Gobierno de Tlaxcala).
Como respuesta al interés mostrado por las comunidades, se impartieron cursos a los habitantes, mayordomos, párrocos y feligreses para elaborar el registro correcto y los conocimientos básicos de conservación preventiva. A esto se agregó la publicación impresa y digital del Manual de Conservación Preventiva.
La comunidad internacional se solidarizó con México: la UNESCO envió una misión de expertos para valorar las afectaciones y destinó recursos para la realización del proyecto ejecutivo para la restauración del Antiguo Conjunto Conventual de Nuestra Señora de la Asunción, en Tochimilco, Puebla. La Unión Europea desplegó una misión de especialistas españoles en materia de protección civil con experiencia en edificios patrimoniales.
El gobierno de Francia ofreció adoptar la restauración de dos inmuebles en Xochimilco y Puebla, mientras que la Universidad de Roma III brindó apoyo para la elaboración de proyectos de restauración en inmuebles del estado de Morelos.
El rejoneador español Pablo Hermoso de Mendoza y el empresario José Antonio Fernández hicieron una importante donación para la restauración de cuatro inmuebles en Atlixco, Puebla.
Programa de actividades, a un año de los sismos
A un año de los sismos de septiembre, la Secretaría de Cultura programó una serie de actividades para reflexionar y difundir información general en torno de este fenómeno natural y sus efectos en el patrimonio cultural, entre las que destacan el Encuentro Internacional de Protección del Patrimonio Cultural ante Desastres Naturales, coordinado por el INAH, del 11 al 13 de septiembre, y en el que participaron especialistas de Estados Unidos, Chile, Puerto Rico, entre otros; la presentación del libro Sismos y Patrimonio Cultural. Testimonios, enseñanza y desafíos, 2017 y 2018; una serie de programas especiales Sismos y patrimonio cultural, realidades y desafíos, trasmitidos en Radio Educación; el estreno de la primera parte del documental En recuperación y un especial de noticias dedicado a la recuperación del patrimonio por el Canal 22; dos concursos nacionales de narración breve y fotografía organizados por el INAH y un concurso de dibujo y pintura infantil coordinado por el INBA; el estreno de una obra coreográfica en la explanada del Palacio de Bellas Artes, así como la realización de conferencias y talleres en recintos culturales.
También destaca la presentación del libro Sismos y patrimonio cultural, que reúne la visión y el análisis de reconocidos especialistas, como Roberto Meli, Alejandro Aravena, Xavier Cortés, Federico Reyes Heroles, Francisco Serrano, Bolfy Cottom, Mónica Lavín, entre otros, dirigido al público en general y que servirá para la formación de estudiantes, académicos e interesados en el tema.
Como propuesta del Comité Ciudadano se creó una plataforma digital con información sobre inmuebles afectados, avances en el proceso de restauración, videos, infografías, boletines y cápsulas informativas que ponen al alcance de la población los procesos de recuperación, datos históricos de los bienes y su relevancia histórica y cultural: https://restauracionpatrimonio.cultura.gob.mx/
Fotos: Cortesía