Afuera de las instalaciones en Periférico Sur número 2905 se encuentran pacientes trabajadores familiares y ciudadanos en espera de que las autoridades del sector Salud den la cara
La Cuarta Transformación no quita el dedo del renglón en su afán por deshacerse de las personas enfermas, ya lo hizo con mujeres y niños con cáncer y lo está intentando con pacientes que padecen alguna enfermedad metal, recortando presupuesto para su atención o quitando a directores de las instituciones para imponer a sus recomendados.
Esto sucede en el Centro Integral de Salud Mental (CISAME), donde la incertidumbre mantiene en vilo a trabajadores y pacientes debido a las intentonas del Gobierno federal por desaparecerlo, a pesar de la gran labor que realizan en favor de los enfermos, la mayoría de escasos recursos, que al no tener un lugar donde ser atendidos quedarían desprotegidos.
Desde el inicio del actual gobierno, el primer ataque a esta institución fue el anuncio del secretario de Salud federal, Jorge Alcocer Varela, de cerrar del CISAME, no se hizo. Posteriormente se les informó que el presupuesto que recibía anualmente para desarrollar su noble labor, sería reducido, y el último golpe es la posible destitución de la directora, Virginia González Torres.
Cabe señalar que Virginia González Torres ha dedicado su vida al servicio y atención de los pacientes con enfermedades mentales. Durante gobiernos anteriores, González Torres se enfrentó a las autoridades para defender y exigir mejores condiciones para los enfermos mentales, en los centros de internamiento pertenecientes a la Secretaría de Salud.
Años fueron los que esta mujer ha luchado hasta que logró la creación del Centro Integral de Salud Mental, mismo que ha dirigido de manera atinada, siempre ayudando a los que menos tienen y cuidando que la atención que se les brinda en el CISAME sea de primera y gratuita.
Ahora, que hay la amenaza de destituirla, trabajadores, pacientes y ciudadanos, cierran filas con ella para impedir tal atropello, por lo que desde las 10:00 horas de este martes, mantienen cerrados los carriles centrales de Periférico Sur, exigiendo la presencia del secretario de Salud, responsable de las decisiones tomadas y que están afectando a los que menos tienen.
Afuera de las instalaciones del CISAME, en Periférico Sur número 2905, en San Jerónimo Lídice, se encuentran pacientes, trabajadores, familiares y ciudadanos, en espera de que las autoridades del sector Salud den la cara.
Foto: Especial
