El objetivo es impulsar la mediación concentración y conciliación para restaurar derechos de inmediato porque es lo más útil para el ciudadano
Con el objetivo de impulsar la mediación, conciliación y concertación, como plantea la Constitución capitalina, así como recibir quejas de la población y buscar la justicia y restauración de derechos, que es lo más útil para la gente, la alcaldesa Clara Brugada Molina y la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDH-CDMX), Nashieli Ramírez Hernández, inauguraron la delegación de esta institución capitalina en Iztapalapa.
La oficina está ubicada en la parte oriente del edificio sede de la Alcaldía Iztapalapa, señaló la alcaldesa durante la ceremonia en la que se firmó un convenio de colaboración para la apertura y operación de esta sede de la CDH-CDMX.
Brugada Molina subrayó la alianza que se fortalece con esa institución para combatir las desigualdades que afectan a los habitantes de la demarcación en distintos ámbitos, también para capacitación de servidores públicos y para impulsar la cultura de los derechos humanos en esta localidad.
Destacó que como una de las principales acciones conjuntas entre la Alcaldía y la CDH-CDMX la formación del «ejército» de orientadoras familiares que desarrollarán talleres familiares en las viviendas iztapalapenses para concientizar y combatir las diversas formas de violencia al interior de los hogares, donde se comete la gran mayoría de éstas y también el mayor porcentaje, más del 70%, de las violaciones sexuales.
Enfatizó que ante el crecimiento de los casos de violencia intrafamiliar y de violaciones sexuales en la demarcación, se decidió no esperar a que las mujeres o las víctimas de estas agresiones acudan a talleres en los centros comunitarios o en algún espacio público o a presentar sus denuncias, sino ir al lugar donde se cometen para desde ahí combatirlos.
La alcaldesa aseguró que acudir a las viviendas con talleres para toda la familia, «es la única manera de combatir efectivamente la violencia», y expuso que con la participación de la CDH-CDMX se han diseñado los cursos que se impartirán. Agregó que esta misma institución capacitará en enero a las 100 mujeres, principalmente trabajadoras sociales y psicólogas, que participarán en este programa para que tengan una adecuada intervención.
Adelantó que en febrero comenzarán el trabajo en las colonias de mayor índice de violencia sexual e intrafamiliar, como Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, las unidades habitacionales Ermita Zaragoza, Vicente Guerrero y Santa Cruz Meyehualco, entre otras, donde las orientadoras llegarán a solicitar una cita con toda la familia y acudirán a la hora que se acuerde, que incluso puede ser de noche o en fin de semana, con el propósito de realizar 10 sesiones.
A su vez, la presidenta de la CDH-CDMX, Nashieli Ramírez Hernández, recordó que la comisión que preside tuvo una oficina desconcentrada en Iztapalapa, la cual hacía la misma actividad que la sede central, pero ahora –conforme al mandato constitucional– es algo diferente, se trata de que la gente sepa que tiene a esta institución cerca pero no sólo para presentar quejas, sino para buscar cotidianamente la justicia, que es lo más útil para los habitantes.
Se busca impulsar la mediación, conciliación y concertación entre el ciudadano afectado en sus derechos fundamentales y la autoridad responsable de ello, aunque –aclaró– de ser necesario también se llevarán a cabo investigaciones y, en su caso, se emitirán las recomendaciones necesarias, conforme a las atribuciones y facultades de la Comisión.
Indicó que Iztapalapa ocupa el primer lugar en el número de quejas presentadas ante la CDH-CDMX, que en este año sumaron cerca de 9 mil, de las cuales 15 por ciento corresponde a esta demarcación y están relacionadas con temas de procuración de justicia, de seguridad y de salud, principalmente.
Ramírez Hernández destacó que lo que se haga bien en materia de derechos humanos en Iztapalapa, se podrá hacer bien en otros lados, pues la demarcación es un laboratorio social en donde hay que seguir desarrollando las mejores prácticas para acercar a la gente al ejercicio de sus derechos.
Finalmente, ambas funcionarias refrendaron su compromiso de continuar el trabajo que se ha desarrollado desde octubre de 2018 en materia de defensa y promoción de los derechos humanos de la población de Iztapalapa.
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