Finanzas

Heineken si, Constellation Brands no, en gobierno morenista de Baja California

Todo el aparato del estado contra Constellation.

TECATE, BC.- Mientras a la empresa cervecera Constellation Brands, el gobierno de MORENA estatal y federal, le negó la oportunidad de operar en Baja California, basado en una consulta ciudadana amañada, a Heineken México no le ha encontrado ningún pretexto y le brinda todo su apoyo, pese a que también utiliza agua para sus operaciones, que era el pretexto que le pusieron a Constellation Brands.

Este lunes, el mandatario estatal, Jaime Bonilla Valdez y Mario Escobedo, secretario de Economía Sustentable y Turismo (SEST) anunciaron que como muestra de la rentabilidad que ofrece Baja California para inversiones a largo plazo, Heineken México invertirá 180 millones de dólares en su planta de Tecate. «Esta empresa mantiene y consolida su confianza en la entidad, a través de mejoras continuas en sus áreas de operación», aseguró Escobedo durante una visita a la planta de Tecate.

HEINEKEN

El responsable del Desarrollo Económico en la entidad, resaltó el hecho de que más compañías sigan considerando esta plaza como apropiada para crecer, tanto por la seguridad que brinda a la inversión, como por los beneficios de desarrollo que implica la generación de empleos y expansión de operaciones. “Heieken México tiene 76 años en Baja California, y genera 2 mil 200 empleos, a los que se sumarán otros 100 colaboradores”, destacó.

Mario Escobedo dijo también que “esa fuerza económica, distribuida en una planta de elaboración de cerveza y nueve centros de distribución, confirma la confianza en nosotros, pero también nuestro compromiso para seguir apoyando al desarrollo empresarial en el estado”.

Todo el aparato del estado contra Constellation

El pasado mes de marzo, luego que se llevó a cabo la consulta a la que convocó el presidente López Obrador y con los votos de sólo 27 mil 973 personas, el gobierno federal decidió no dar los permisos correspondientes para la operación de la planta cervecera Constellation Brands en Mexicali, Baja California, a pesar de que significaba una inversión de mil 500 millones de dólares y cientos de empleos.

Fue en 2016, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, cuando se anunció el proyecto de Constellation Brands, cuya planta tendría una capacidad de 10 millones de hectolitros, una inversión de mil 500 millones de dólares y que estaría concluida en cuatro o cinco años. Estaría ubicada en el kilómetro 10.5 de la carretera Mexicali-San Felipe, en el valle de Mexicali y permitiría atender al estado de California, en Estados Unidos, considerado como el mayor mercado de cerveza de Constellation Brands, la tercera cervecera más grande de Estados Unidos y es dueña de las marcas del mexicano Grupo Modelo en ese país.

Pero como nunca faltan los que se niegan al avance del país, en 2017 agricultores de la región e integrantes de la organización Mexicali Resiste, denunciaron que la empresa no contaba con su permiso de uso de suelo, y que la planta que permanecería en Mexicali al menos 50 años, consumiría 20 millones de metros cúbicos anuales de un agua que, dijeron, pertenecía a los agricultores locales y a la población de la ciudad y del Valle de Mexicali.

Las protestas y bloqueos no se hicieron esperar y llegaron hasta la confrontación entre activistas y fuerzas armadas, ya que los integrantes de Mexicali Resiste y campesinos aseguraban que la construcción de un ducto de 47 kilómetros para llevar agua del Río Colorado hasta el sur de Mexicali y abastecer a la nueva planta de Constellation provocaría problemas de suministro de agua.

Sus protestas no prosperaron y la construcción de la planta inició, hasta que llegó el gobierno morenista, estatal y federal, y lo que no hicieron en Chihuahua porque está gobernado por el PAN, en Baja California si; intervino la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la de Gobernación, el presidente y hasta la Comisión Nacional de Derechos Humanos, con el argumento de que el Valle de Mexicali enfrenta importantes retos para utilizar el agua de manera responsable, «dado que extrae más agua de la que se recarga».

La directora general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez Cisneros, indicó: «Aunque el abasto para la población del Valle de Mexicali se encuentra asegurado para los próximos 50 años, se requiere invertir en infraestructura hidroagrícola para disminuir la sobreexplotación del acuífero y hacer un uso de riego más eficiente».

Al respecto, la empresa Constellation Brands aseguró que la operación de la cervecera no afectaría los recursos hídricos disponibles para Mexicali, que son de 82 millones de metros cúbicos al año. “No utilizaremos más agua de lo necesario. Tenemos un uso limitado por 5.8 millones de metros cúbicos”, dijo su representante.

En febrero de 2020, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación por presunta “violación al derecho humano al agua, derivada de la construcción y operación de planta cervecera.

Basada en la defensa del derecho humano al agua, la recomendación no se limita a investigar si hay o no capacidad hídrica para la instalación de una cervecera en Mexicali, sino que asume la defensa del derecho al agua prioritariamente para consumo personal y doméstico, que debe cuidarse estrictamente en una zona desértica y con decreto de veda, por lo que no puede hacerse abstracción del contexto en que una empresa privada pretende hacer uso del agua”, se lee en un comunicado de la CNDH sobre esta recomendación, instancia que nunca se presentó en Chihuahua para apoyar a los agricultores que también defendían su agua.

El organismo destacó en ese entonces que la consulta ciudadana no era una solución, pues “los derechos humanos no se someten a consulta, sino que se deben respetar”.

Pese a esto, el 3 de marzo de 2020, López Obrador informó que por una resolución de la Secretaría de Medio Ambiente se llevaría a cabo una consulta para ver si operaba o no esta planta cervecera. “Nos toca a nosotros estar enfrentando estos asuntos y por eso tenemos que escuchar a la gente. Y dicen: ‘Se va a establecer un mal precedente si se hace una consulta, porque se afecta la inversión’. No, ya el mal precedente se dio cuando, sin tomar en cuenta a la gente, dieron los permisos”, dijo el mandatario durante su conferencia de prensa matutina. Entonces, ¿tenían o no los permisos?

López Obrador pidió en ese momento a los inversionistas extranjeros y empresarios que actúen con ética.  ¿Qué pasaba antes? Venían y veían a México como tierra de conquista, sobre todo las empresas españolas: ‘Vamos, porque ahí sí estamos bien parados; tenemos buenas influencias, hacemos y deshacemos; ahí está el negocio, ahí está el negocio lucrativo’. No, ya eso no lo podemos permitir”, aseguró.

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