Juan Samuel Delgado Cedillo, presidente de La Organización Mundial Por la Paz (OMPP/WOFP), entregó el premio especial La Paloma de La Paz, al profesor Faustin Archange Touadera, presidente de la República Centroafricana y jefe de Estado, por los resultados obtenidos durante el proceso de pacificación en algunas regiones de África.
La Paloma de la Paz es el símbolo más importante que la OMPP otorga como premio especial a quienes con sus acciones han buscado, luchado o contribuido en la pacificación a nivel global y a la solución de conflictos en cualquier región del mundo, sin hacer distinción de creencias religiosas, preferencias políticas o color de piel.
En un evento realizado en las instalaciones oficiales de la presidencia en la ciudad de Bangui, capital de ese país, al que asistieron los más altos funcionarios del gobierno y de la política centroafricana, así como embajadores y ministros de algunos países de la región, Samuel Delgado, dijo que la paz es un derecho universal para quienes habitamos este planeta y de nosotros depende nuestra existencia con las acciones que realizamos y de cómo nos relacionamos con los demás.
Trabajar por la paz no sólo son palabras y buenas intenciones, a la paz se llega con las acciones que realizamos día con día.
La paz interior es donde todo inicia y se transmite con nuestro comportamiento como especie.
Todos necesitamos llevar a cabo acciones de paz.
Al hacer uso de la palabra, Faustin Archange Touadera, quien se ha convertido en un interlocutor muy reconocido y respetado en el continente africano por desactivar, a través del diálogo, enfrentamientos entre grupos de rebeldes y autoridades de África, destacó el apoyo que le ha otorgado la sociedad civil para llegar a los resultados obtenidos durante el proceso de pacificación de la región, un logro que hasta entonces había sido negado por muchos años a los pobladores de los países involucrados, aunque aún hay mucho por hacer.
La Organización Mundial por la Paz seguirá apoyando aquellos proyectos de paz dirigidos a la población que más lo necesite, siempre en conjunto con las autoridades, la sociedad civil y aquellos sectores públicos y privados en todos los países del mundo que quieran llevar a cabo acciones de paz y bienestar, siempre en favor de la gente.