Este martes, la doctora Carolina Jiménez Sandoval tomó posesión como presidenta de la Oficina de Washington para América Latina (WOLA), y con ello inaugura una nueva era de liderazgo.
La doctora Jiménez Sandoval trae a WOLA más de 20 años de experiencia en investigación y defensa de los derechos humanos en las Américas y el mundo. Luego de haberse desempeñado durante más de dos décadas como líder en su campo a lo largo de la región y en Washington D.C., se perfila ahora en la labor de guiar el equipo de WOLA hacia un impacto estratégico cada vez más significativo a favor de la justicia social y los derechos humanos.
Llega a WOLA procedente de amnistía Internacional, donde fue directora adjunta de investigación para las Américas en la ciudad de México. En sus casi siete años allí, dirigió un equipo de investigadores que documentaba violaciones de derechos humanos al tiempo que diseñaba estrategias de incidencia para garantizar el respeto de los derechos fundamentales.
Su trayectoria incluye una amplia variedad de temas y países, que va desde graves delitos bajo el derecho internacional hasta la promoción de los derechos de los migrantes y refugiados. Anteriormente, trabajo para el programa de América Latina de Open Society Foundations con sede en Washington D.C. (Lea aquí la biografía completa de la Dra. Jiménez).
Es la primera persona de América Latina en liderar WOLA en sus más de 45 años de historia.
Sobre los desafíos a los derechos humanos en las Américas, y su visión para la investigación e incidencia de WOLA, la doctora Jiménez Sandoval comentó:
“Vivimos sin duda alguna tiempos difíciles y complejos. Tiempos en los que una pandemia vino a mostrarnos uno de los rostros más duros de la desigualdad que por tantas décadas ha caracterizado a nuestras sociedades. Tiempos en los que la democracia parece ser una promesa lejana, y por el contrario, las tendencias autoritarias de varios líderes políticos de la región parecieran la orden del día”, dijo.
La nueva presidenta de WOLA agregó que, “a pesar de este panorama preocupante y desolador, América Latina es también el lugar que habita una sociedad civil vibrante, llena de energía y comprometida en la lucha y la defensa de los derechos humanos. WOLA continuará siendo una organización aliada y cercana. Promoveremos investigaciones, incidencia y comunicaciones con una visión innovadora, para continuar elaborando y pensando en soluciones a las principales problemáticas de derechos humanos que vive la región”, concluyó.
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