Migración

Migración golpea a quienes dejan sus países y a quien los acoge

Pocos logran sortear los peligros; varios mueren en el intento y otros tantos son deportados a sus países de origen.

La migración golpea severamente no sólo a las personas que dejan sus países, sino también a las naciones que los acogen y México no es la excepción, por lo que en varias ocasiones las autoridades solicitan el apoyo de la sociedad para atender a los desplazados. Sin embargo, los fallecimientos y accidentes siguieron presentes durante 2020 y el siguiente año.

En agosto de 2020, el Instituto Nacional de Migración (INM) realizó el Migratón 2020 con el apoyo de personas, familias, empresas, instituciones, asociaciones e instancias gubernamentales, que manifestaron su solidaridad y apoyo  al donar más de 25 mil artículos empaquetados e higienizados con juguetes, pañales, bolsas con ropa para personas adultas, jóvenes e infantes, calzado diverso, cajas con abarrotes, libros y revistas, entre otros productos.

El objetivo era brindar una mayor y mejor atención a la población migrante en contexto de movilidad en México, por lo que el INM, a través de sus 32 Oficinas de Representación, distribuyeron las aportaciones en sus estaciones migratorias y estancias provisionales, asociaciones civiles, religiosas, casas y alberges que prestan techo y auxilio de las personas extranjeras que ingresan y transitan por territorio nacional.

Al cierre de la edición del Migratón 2020, se dio a conocer que, entre muchos otros, fueron recolectados:

• 17 mil 887 paquetes envueltos que contienen juguetes (carritos de metal y plástico, peluches, muñecos y muñecas de tela y plástico,). Así como productos de higiene personal (shampoo, jabón para manos, cepillos de dientes y para cabello, pomadas y cremas corporales), medicamentos, rollos de papel higiénico, toallitas húmedas, jabón de pasta para lavar ropa, abarrotes, alimentos para bebés, pañales, pañaleras, mecedoras, biberones, y zapatitos para bebés, entre otros.

• 312 bolsas con ropa de talla variada, tanto de mujer y de hombre para personas adultas, jóvenes, y recién nacidos, tales como pantalones, cinturones, mallas casuales, blusas, camisetas, trusas nuevas, y sandalias. Además de calcetas, calcetines, guantes, bufandas, gorras, pañuelos de tela, mamelucos, toallas para secarse el cuerpo y las manos, entre otros.

• 44 cajas con abarrotes con arroz, frijol, avena, azúcar, café soluble, granola, harina de maíz y trigo, mayonesa, cubiertos de plástico, servilletas, manteles, platos, tazas y vasos desechables, y perecederos. También libros diversos (algunos de ellos para colorear), historietas animadas, y revistas; juegos de mesa como rompecabezas, lotería, maratón, memoramas, serpientes y escaleras, entre otros.

Muere migrante haitiano y sacan su cuerpo a la calle

El 30 de agotos de 2020, se dio a conocer el fallecimiento de un migrante de origen haitiano, en Tapachula, Chiapas, a causa del hambre y un cuadro de fiebre que padecía desde días atrás, de acuerdo a sus compatriotas que dieron detalles a las autoridades.

La comunidad haitiana pidió a las autoridades municipales, a la Fiscalia General del Estado y a la Secretaria de Salud, auxilio para el migrante. Sin embargo no obtuvieron respuesta, y poco después murió.

Durante casi 12 horas el cuerpo permaneció en la habitación que compartía con otros migrantes, por lo que el resto de sus compañeros pidieron auxilio para poderlo sepultar. Tampoco recibieron respuesta, decidieron sacarlo a la calle para urgir el levantamiento del cuerpo.

Después de una hora de estar en la calle, el cádaver fue levantado en presencia de Protección Civil y la Policía Municipal, bajo el protocolo de muerte por COVID-19.

El hombre tenía 25 años, llegó a la ciudad de Tapachula en marzo de 2020, justo cuando se declaró la pandemia en el país. No pudo obtener los docmentos para regular su estancia y poder trabajar para subsistir.

Rescatan a migrante guatemalteco en región montañosa, pero su madre y hermano menor murieron

El 31 de agosto de 2020, se dio a conocer que Grupo Beta Ojinaga, Chihuahua, rescató a una persona migrante de origen guatemalteco, quien presentó problemas de salud por cuadro de deshidratación y síntomas de golpe de calor tras permanecer extraviada durante varios días en montañas de la entidad.

Sin embargo, su madre y hermano menor no tuvieron la suerte de ser rescatados a tiempo y murieron en una zona de difícil acceso. Los cuerpos fueron recuperados, para lo cual se requirió del apoyo y coordinación con personal de la Secretaría de Seguridad Pública, el Departamento de Bomberos Voluntarios y la Fiscalía General, las tres instancias pertenecientes al estado de Chihuahua.

Los hechos ocurrieron el sábado 29 de agosto cuando personal del Grupo Beta Ojinaga recibió información de la patrulla fronteriza de Estados Unidos (Border Patrol), en la que una persona migrante guatemalteca alertó que una mujer adulta y un joven de la misma nacionalidad, ambos con complicaciones médicas, se encontraban en la montaña del lado de territorio mexicano, por lo cual se inició un proceso de búsqueda ese mismo día.

A las 11:30 horas del domingo 30 de agosto se ubicó y rescató en la zona del Rancho Cuatralbo a una persona migrante guatemalteca de sexo masculino, quien antes de ser trasladado para su atención médica, señaló que su madre y hermano permanecían en la montaña.

Con los datos e información proporcionada se activó nuevamente la búsqueda de su familia, la cual se habría extraviado en la región montañosa conocida como Ejido El Comedor y Rancho Los Colorados.

A partir del rastreo de las huellas que dejó dicha persona migrante se realizó la búsqueda pie tierra por montañas, arroyos y veredas por más de seis horas. A las 18:50 horas fue localizado el cuerpo de una persona sin vida de sexo masculino, y a las 19:07 horas el cuerpo de una persona de sexo femenino también sin vida.

Posteriormente, a las 19:40 horas, comenzó la extracción de los migrantes fallecidos, procedimiento que concluyó con su traslado a la ciudad de Ojinaga a las 01:30 horas de este lunes.

Al joven migrante sobreviviente se le brindó atención médica, comida y se le apoyó con telefonía y gestión de albergue para pernoctar.

Fotos: Cortesía

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