Columnas

Sin útiles ni uniforme

TEXTUAL-es

J. Adalberto Villasana

Leticia Ramírez Amaya llegó a la Secretaría de Educación Pública como estudiante el primer día del ciclo escolar, pero como el que no llevó el uniforme completo ni los útiles. Hizo recordar al alumno de nuevo ingreso que no sabía ni qué pasaría. Dejó entrever una vez más la improvisación que se padece en un tema tan importante como la enseñanza.

Debe quedar claro que los alumnos deben adquirir en la escuela los conocimientos necesarios y desarrollar las destrezas y habilidades necesarias para su integración a las actividades de desarrollo personal, que repercuten en el progreso de la nación.

Es claro que no se trata de ideologías, los alumnos deben desarrollar comprensión lectora, razonamiento matemático y competencia científica.

Recordemos que como método educativo, el aprendizaje basado en el pensamiento tiene como objetivo otorgar herramientas para contextualizar, relacionar, analizar, entender, argumentar, convertir información en conocimiento y desarrollar el pensamiento, más allá de la memorización. Hay otras formas de enseñar.

Una egresada de la Normal de Maestros tendría por lo menos, en la mente, media docena de métodos de enseñanza.

“Nosotros estamos por una revolución de las conciencias en donde la gente realmente pueda reflexionar sobre lo que está pasando en el mundo. Estamos por una educación humanista, por una educación inclusiva, por una educación en donde todos quepamos”, afirmó Ramírez Amaya en una entrevista para N+.

Claro que se puede trabajar por una revolución de conciencias, pero los alumnos deben entender lo que leen, saber qué operación matemática hacer, hasta cuando van a la tienda y deben desarrollar competencias científicas para el desarrollo de sus vidas.

En casi cuatro años del actual gobierno, no hay signos de que les interese la educación pública, la cual es la palanca de desarrollo de todas las naciones.

Las pruebas PISA 2018 ubicaron a Uruguay (en ese momento con 15 años de gobiernos de izquierda) entre los países con mejores desempeños de Latinoamérica. En matemática estaba primero en la región junto con Chile, por encima del resto de los países. En lectura por debajo de Chile y en un nivel similar a Costa Rica y México, aunque con mayor cobertura que estos países.

Pero no quedó sólo en una entrevista, al reunirse con los reporteros en la Sala de Prensa, la titular de SEP no respondió a las preguntas sobre temas de enseñanza-aprendizaje. Todo lo dejó para después. Para ese mañana que, a veces, nunca llega.

Al igual que su antecesora Delfina Gómez Álvarez, Ramírez Amaya deja más dudas que respuestas. Esteban Moctezuma Barrágan quien empezó el sexenio. Mejor se fue. Este ha sido el peor desfile en SEP en menos de cuatro años.

Textualmente hay que decirlo: Hay más de media docena de saber cómo se le va a enseñar matemáticas a los niños, pero la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez, dijo que no podía contestar esa pregunta. Hace falta ponerse a trabajar e un Plan Nacional de Educación, pero eso lo debieron tener preparado desde antes de asumir la administración del país hace ya casi cuatro años.

En Twitter @TXTUALes

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