En cada informe, que ocurre a la menor provocación, el presidente López Obrador asegura que ya acabó con el huachicol, pero la realidad constantemente los desmiente, como ocurrió ayer con la explosión de un ducto por una presunta toma clandestina.
El siniestro se registró en el municipio de Epazoyucan, donde un fuerte incendio puso en peligro a habitantes de la comunidad de San Juan Tizahuapan y El Manzano, en Hidalgo. A kilómetros de distancia se podía observar la conflagración.
De acuerdo a algunos reportes, el incidente ocurrió cuando personal de PEMEX realizaba trabajos de reparación sobre una de las líneas que presentaba fugas de combustible, mientras el evento se encontraba en vías de control, pocas casas aledañas fueron evacuadas.
Derivado de la fuga de combustible una llamarada se desprendió desde el suelo, y tras el estruendo habitantes de la zona reportaron mediante llamadas al número de emergencias y a través de redes sociales.
Otras versiones indican que la explosión fue provocada por una posible toma ilegal para la sustracción de combustible, sin que hasta el momento se haya confirmado por las autoridades.
El fuego se pudo ver desde diversos municipios, por lo que se desplegaron unidades del gobierno estatal, junto a diversas corporaciones y elementos de Protección Civil de Mineral del Monte, Mineral de la Reforma, Pachuca, y del mismo Epazoyucan.
Hasta el momento no se ha informado sobre personas o pérdidas que lamentar, pero si deja en evidencia que es mentira que hayan acabado con el huachicol.
Fotos y video: Especial
