Ingresó al IMSS de Tlaxcala por una fractura expuesta en pierna derecha y salió muerto.
Familiares de Rafael Durán Morales, de 29 años de edad, denuncian que la negligencia de médicos del IMSS Zona 2 en Apizaco y del Hospital del IMSS Zona 1 de Tlaxcala, provocó la muerte del joven este 10 de mayo. El cuerpo aun no lo reciben porque la Fiscalía del Estado lo tiene retenido.
Los deudos de Rafael narraron que el 7 de mayo, Rafael viajó a Terrenate, Tlaxcala, de donde es oriundo, pero que 10 minutos (aproximadamente a las 09:40 de la mañana), antes de llegar a su destino derrapó sufriendo una lesión en la pierna derecha con un tubo, con fractura expuesta.
Indicaron que al lugar llegó una ambulancia que lo trasladó al hospital del IMSS Zona 2 de Apizaco, Tlaxcala, “donde lo ingresaron pero solo le vendaron la pierna, le pusieron suero con un medicamento, suponemos para el dolor”, narraron.
Dijo que ella se encontraba en la Ciudad de México, “cuando él me llamó y me avisó de su accidente. Él siempre estuvo conciente. Viajo a Apizaco y llego a las 13:30 horas, entro a verlo, lo encuentro acostado en una camilla con dolor y su venda llena de sangre, mientras las enfermeras muy entretenidas en su celular y cotorreando entre ellas. Salí a preguntar a qué hora lo iban a intervenir y me dijeron que no sabían, que tal vez en 2 o 3 horas, o en la noche o mañana, nadie me pudo decir algo”.
Señaló que ella tuvo que regresa a CDMX y a las 23:30 horas, “Rafael me llamó y me dijo que ya lo habían operado, que solo sentía un poco de dolor, yo no le creí y al día siguiente fui a verlo, entré y ya estaba en piso, en la cama 53. Me comentó que sentía dolor intenso, que le ardía el estómago, que sentía náuseas y hasta vómito. Tenía taquicardia, sudoración y un poco de dificultad para respirar, fui a ver a una enfermera 1, 2 y 3 veces hasta que fue y le puso en el suero un medicamento que no supe qué era porque pregunté y me dijeron que hasta que llegara su médico, quien nunca llegó.
Me regresé a CDMX y él me mandó una foto donde se veía que estaba sudando mucho, le dije diles que qué pasa, por qué el sudor y que el dolor ya era intenso, me dijo que lo revisaron y que le dijeron que era normal. Todo el dia martes me estuvo llamando y escibiendo de como iba. En la noche del 9 de mayo me fui a Tlaxcala ya estando cerca, como a la 01:40 de la madrugada me llamó para decirme que lo están trasladando a Tlaxcala, le pregunto por qué y me dice que ahí le van a hacer más estudios para que le puedan hacer la cirugía. Le pregunto si firmó algún consentimiento y me dijo que no, que solo llegaron, lo desconectaron y se lo llevaron.
A las 04:30 de la madrugada me vuelve a llamar y me dice que está en la Hospital del IMSS Zona 1 de Tlaxcala, que lo quieren intubar por 5 días, supuestamente para darle soporte a su respiración y aprovecharían para intervenirlo. Como estaba a 30 minutos, tomo el camino hacia allá y me marca cerca de las 5 de la madrugada para avisarme que ya lo van a sedar, le pregunto por qué y me dice que hicieron firmar a su mamá y a él (la mamá es una persona mayor y no sabe leer bien), pero siento que fue presión sicologica y terminó firmando.
Me pregunta si ya voy a llegar y le contesto que estoy a 10 minutos, trato de reconfortarlo, le digo que esté tranquilo, que Dios lo bendiga, que le eche ganas y que cuando despierte yo voy a estar ahí, que tenga fe, en eso escucho una voz de mujer que le dice que no puede hablar por teléfono ya que se está agitando mucho. Escucho que le quita el teléfono. Llego al hospital, le marco, contesta su mamá, me dice que ya lo sedaron y lo están intubando.
A las 08:30 de la mañana nos llaman a su mamá y a mi de Trabajo Social, entramos, nos hacen preguntas sobre él y me piden que vaya a imprimir su carnet del IMSS y su alta, regreso y me dicen que firme para que le hagan transfusión de sangre y plaquetas. El supuesto doctor estaba dormido, porque no me pudo decir o dar una explicacion qué es lo que tenia, solo me dijo firme por si lo necesita, firmé y me salí a la sala de espera.
Salió otro doctor y me dijo que él acababa de recibir el turno y que Rafael está grave, muy grave, pero que ya le iban a hacer unas tomografias para ver realmente lo que tiene, porque a él le dijeron de la fractura y que tenía dificultad para respirar porque el tuétano del hueso se le subio a los pulmones y se le contaminaron.
El doctor se metió y como a la media hora me dice que ya le sacaron las tomografias y que sale una contusión en su pulmón derecho por el mismo golpe del accidente, le dije que si las podía ver, pero me dijo que no porque faltaban más, pero si me dijo que Rafael estaba apunto de caer en paro, me dice salga y ahorita le informo.
No acababa de salir cuando me dice, vea ya cayó en paro, llegan muchos enfermeros lo rodean y le ponen los choques en su pecho. El doctor se sube encima de él y le hace con las manos para revivirlo, yo me hinco a rezar afuerita y viendo todo, llegan las de seguridad a sacarme, yo les digo que me permitan quedarme, me empiezan a jalonear pues yo me quedo, y sale el doctor y me dice se hizo todo lo que se pudo y que ya había fallecido.
Con esa tranquilidad todos se retiraron y siguieron en su cotorreo y su celular, yo me salgo llena de coraje y dolor porque lo mataron por no atenderlo o no saber ni lo que tenía. Aviso a mi familia, llegan, yo salgo hasta afuera a verlos y como era 10 de mayo va entrando un hombre, no se si doctor o enfermero, pero iba vestido como el personal de ahí, con una charola de cervezas, y ahí si no hubo problema, pasó sin ningún problema, yo entre mi dolor solo lo vi, no pude tomar foto, ya me esperaba mi familia.
Esperamos el cuerpo su familia y mi familia, llega el Semefo de la Procuraduría y se lo llevan, nos vamos para que nos lo entreguen, pero nos dicen que no sale el cuerpo porque ya le hicieron la necropcia y no coincide con el informe del hospital.
Mandan a declarar a sus hermanos y ellos cuentan que primero entró a Apizaco y todo lo que describí arriba, el Procurador revisa el expediente y se da cuenta que es un joven de 29 años, no padece de nada y no tiene vicios, y entonces dice ‘alto, aquí hay algo raro, me suena a negligencia’, se llevan muestras de su corazón, su pulmón y de sangre, pero no sale el motivo de su deceso, por lo que lo detienen por 10 horas hasta agotar cualquier duda y hacerle todos los exámenes necesarios. Estamos en espera que lo entreguen, tentativamente el próximo lunes 22 de mayo”.
Rafael Durán Morales.
Hasta aquí la dolorosa narración de familiares de Rafael Durán Morales, quien murió a manos de irresponsables médicos y enfermeras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Tlaxcala, quienes deberían ser despojados de su cédula porque no están capacitados para atender enfermos o simplemente les vale la vida de los pacientes.
Fotos: Cortesía de la Familia
