La Coalición para la Innovación en la Preparación contra Epidemias (CEPI, por sus siglas en inglés), se está asociando con los principales científicos del Hospital Houston Methodist para el desarrollo de un prometedor tipo de tecnología de defensa contra enfermedades que podría allanar el camino para nuevas vacunas de «ARN circular» que sean más estables, duraderas y rentables que las actuales.
El equipo de vacunología del Houston Methodist tiene como objetivo avanzar en su plataforma ‘circRNA’, una innovación de alto impacto que ofrece un potencial significativo más allá de las vacunas de ARNm para defender a las poblaciones contra futuras amenazas epidémicas y pandémicas. El proyecto se centra en el diseño y la evaluación preclínica de candidatos prioritarios a vacunas ‘circRNA’, como, por ejemplo: virus del Chikungunya, virus del Ébola, virus de Lassa, coronavirus del síndrome respiratorio de Oriente Medio, virus Nipah, virus de la fiebre del Valle del Rift y SARS-CoV-2).
«Estamos entusiasmados de trabajar con el desarrollo de la tecnología de vacunas de ARN circular para proteger al mundo contra las amenazas virales emergentes», dijo H. Dirk Sostman, M.D., presidente y director ejecutivo del Instituto Académico del Hospital Houston Methodist.
La actual tecnología de vacunas de ARN, que utiliza la propia maquinaria del cuerpo para producir proteínas antigénicas en lugar de inyectar un antígeno del virus en el receptor, ha logrado avances significativos en los últimos años. El avance más revolucionario se produjo con su validación por primera vez durante la pandemia de COVID-19, cuando se utilizó para desarrollar nuevas vacunas en menos de un año que salvaron millones de vidas y redujeron el número de casos graves de COVID-19.
Si bien ahora se espera que las vacunas de ARNm desempeñen un papel crucial en la prevención y el control de futuros brotes y pandemias, también tienen algunas limitaciones, por ejemplo, en comparación con otros tipos de vacunas, actualmente son caras de fabricar y requieren una infraestructura de almacenamiento y transporte de cadena de frío costosa y compleja,
Por otro lado, su nombre indica, la tecnología de vacunas de ARN circular utiliza un ARN de circuito cerrado, lo que podría permitir que las vacunas candidatas sean más estables y más duraderas que las actuales de ARNm, cuya estructura química es lineal. La tecnología también podría ofrecer una mayor eficacia y en dosis más pequeñas.
“La plataforma de circRNA del Hospital Houston Methodist aún se encuentra en las primeras etapas de desarrollo, pero tiene el potencial de ser eficaz en regímenes de dosis única, reducir la cantidad de ARN necesaria por dosis y reducir el costo de las vacunas basadas en ARN, lo que podría contribuir en conjunto a la accesibilidad de las vacunas en amplios sectores de la población mundial”, afirmó el doctor John Cooke, director del Centro de Terapias de ARN del Hospital Houston Methodist.
Las mejoras en este tipo de tecnologías de ARNm de respuesta rápida pueden contribuir a la “Misión de los 100 Días”, un objetivo respaldado por los líderes del G7 y el G20, para comprimir los plazos de desarrollo de vacunas a 100 días.
Facilitar el acceso equitativo a las vacunas y a la comunidad científica mundial
CEPI y el Hospital Houston Methodist, se comprometen a permitir el acceso equitativo a los resultados de este programa.
Esto significa que las vacunas estarán disponibles primero para las poblaciones en riesgo cuando y donde se necesiten a un precio asequible. Los resultados, incluidos los datos generados como parte de este proyecto, se publicarán en acceso abierto en beneficio de toda la comunidad científica mundial.
Foto: Flow