Una adecuada estrategia de seguridad en el autotransporte de carga debe ser pensada y desarrollada de forma integral (holística) con la participación de todos los procesos logísticos, pensando y poniendo en el centro al operador. Aquí reside la diferencia entre ser víctima del delito o de algún accidente. En la actualidad, después del narcotráfico y antes del “guachicoleo”, el robo de mercancías en tránsito en una de las actividades delictivas de mayor porcentaje.
La Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada e Industria Satelital (AMESIS), en voz de su presidente Ricardo Bustamante Medina, recomienda que además de los indispensables equipos de geolocalización y las custodias físicas y/o virtuales, las empresas transportistas cuenten con la asesoría de expertos consultores en materia de protección para diseñar alguna estrategia para el eficiente resguardo de las mercancías en tránsito y sobre todo del operador, pues por décadas, las empresas transportistas han implementado medidas de seguridad, basadas en las cargas y el camión, pero pocas veces pensadas en el chofer.
“Es importante tener en cuenta desafíos y buenas prácticas para reducción de los factores de riesgo por accidentes, robos (con y sin violencia) y pérdidas de todo tipo durante la ejecución de las operaciones de transporte de carga y sus servicios anexos, así como complementarios en almacenes, CEDIS, recepción de la carga, maniobras de carga y descarga, ruta de traslado, entre otros”, refiere Bustamante Medina.
Los operadores de autotransporte (dueños de líneas de camiones y choferes) deben analizar su exposición a diversos riesgos, los cuales se pueden dividir en:
Causa externa – debido a la naturaleza de la actividad
Causa interna – por las condiciones de trabajo.
Posibles riesgos – causados por distintos agentes como físicos, químicos, biológicos o psicosociales
Acciones clave
Cuidado del operador
- Poniendo su seguridad en el centro de la operación.
- Capacitación: conductores y operarios logísticos.
- Catálogo de números de emergencia.
- Manejo de riesgos: operador debe saber qué hacer en caso de ser víctima de delito.
- Evaluaciones médicas: previas y posteriores al viaje.
- Jornadas de descanso: ordinarias y obligatorias durante y después de ruta.
- Información sobre el estado de alerta, efectos y consecuencias de la fatiga o somnolencia.
- Sensibilización: para responsables de logística y del área comercial, sobre consecuencias de la fatiga de conducción, rutas y zonas de alto riesgo delictivo.
Procesos operacionales
- Manejo de tecnología: conocer el uso y alcances de la videovigilancia a bordo y remota, botón de pánico, telemetría, etc.
- Protocolos de seguridad: selección de tecnología, custodios e identificación de posibles operadores con conductas sospechosas o que hayan sido víctimas constantes de robo.
- Análisis de riesgos de rutas, manual para reportes de novedades y anomalías, listas de chequeo del estado técnico-mecánico de la unidad y las condiciones físicas del operador, protocolo en caso de fallas mecánicas, robo de mercancía, desvíos de rutas, etc.
- Definir y reforzar protocolos, la implementación procedimientos y manuales serán fundamentales para la prevención, disuasión y reacción ante diferentes eventualidades.
- Entrenamiento del personal operativo y administrativo en protocolos y procedimientos de protección. Desarrollar e implementar plan de contingencia en ruta.
- Cumplir la política de descanso de los operadores, en apego a la norma 087.
- Identificación de horarios recurrentes de asaltos o robos, revisar con cliente la modificación de horarios de entrega.
- Informar al operador sobre incidentes carreteros en ruta, hechos violentos o sociales.
- Establecer rutas, horarios y puntos de descanso.
- Evitar que las cajas o el embalaje contengan sellos, nombres, marcas del tipo de mercancía.
La estrategia de seguridad -destaca el presidente de AMESIS- y su gestión, debe construirse y actualizarse constantemente, pero sobre todo realizarla de manera conjunta con todas las áreas involucradas. Protección de activos y prevención de accidentes van de la mano, sobre doto cuando sabemos que en México el robo de mercancías ha alcanzado puntos muy elevados en los últimos cinco años con pérdidas económicas de varios millones de pesos al año.
Para el titular de la AMESIS es prioridad actualizar periódicamente los directorios telefónicos de emergencias (Guardia Nacional, policías locales, bomberos y hospitales) para cada viaje, compartir información con las autoridades para identificar rutas y horarios vulnerables, comunicación constante entre el operador y el centro de monitoreo, establecer rutas alternativas ante algún incidente, ensayar periódicamente protocolos de respuesta a emergencias en ruta y no utilizar caravanas con vehículos de características similares en cuanto a modelo y peso.
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