Autoridades de la ahora Secretaría de Gestión Integral del Agua, que sustituye a Sacmex atendieron esta mañana a los habitantes del pueblo de Parres El Guarda, de la Alcaldía Tlalpan, quienes desde hace seis años sufren de frecuentes inundaciones graves que ya le costaron la vida a un vecino y millonarias pérdidas en muebles y enseres domésticos.
Desde antes de las nueve de la mañana funcionarios de la dependencia de la Ciudad de México que gobierna Clara Brugada como jefa de Gobierno, acudieron a la esquina de la calle Laureles y la carretera federal, en donde escucharon las demandas y propusieron una mesa de trabajo que rechazaron los vecinos, pues llevan años acudiendo a esas reuniones.
Se propuso la firma de una serie de acuerdos para que se retomen las acciones que dejaron inconclusas las autoridades de Sacmex de la administración anterior, que se de seguimiento a las gestiones que ya estaban avanzadas, a fin de lograr una solución definitiva y se retome el cauce natural del agua de lluvia que se acumula en la calle de Laureles, inundando a todas las viviendas y calles adyacentes.
Entre los acuerdos firmados por autoridades y vecinos destaca la reposición de bombas de agua que mitiguen la gran cantidad de escurrimientos pluviales; elaborar un plan de acciones inmediatas y la revisión de todos los expedientes para dar seguimiento a lo que se quedó inconcluso, así como el pago de seguros que no hizo la administración anterior en favor de los damnificados.
En punto de las 11:00 horas los vecinos bloquearon la circulación en ambos sentidos de la carretera federal, colocaron los muebles que se les dañaron en las inundaciones, piedras, llantas y sus propios cuerpos para impedir el paso de los vehículos.
La manifestación pacífica de los vecinos causó molestias a quienes circulaban por esa carretera, por lo que las autoridades de inmediato sacaron un documento en el que comenzaron a anotar los compromisos; la primera fecha que se fijó fue la del próximo domingo 1 de diciembre a las 11:00 horas, para llevar los expedientes y un plan de trabajo que se iniciará de inmediato.
A lo largo de seis años, lo que fue el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) originó esta problemática, su primera acción encabezada por el ingeniero Ismael Zambrano fue cerrar el cauce natural de los escurrimientos, sin escuchar a los vecinos que le pedían que evitara el cierre de esos cauces.
Lejos de corregir esa irregularidad, que es un delito federal sancionado por la Ley General de Aguas Nacionales, Sacmex inició en coordinación con la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr) una serie de obras millonarias.
Dichos trabajos, lejos de aliviar el problema, lo agravó, pues desviaron los riachuelos del cerro del Ocopiasco, para canalizarlos a una sola bajada de agua que desemboca en la calle de Laureles y se agravaron las inundaciones, que ahora también afectan a los productores agrícolas de la región, ya que inundan sus parcelas y destruyen sus cultivos.
Para atender las demandas de los vecinos de Parres asistieron el subsecretario del Agua, Mario Esparza; el Gerente General de la Secretaría del Agua, Alfonso Hernández López; la directora de Concertación Ciudadana, María del Pilar Corona; la Directora General de Drenaje, Ana Karina Muñoz Gutiérrez, entre otros funcionarios que también firmaron el documento de acuerdos y compromisos.