La mayoría, si no es que todos los que participaron en la marcha del 2 de octubre, seguramente ni vivieron esa negra página de la historia de México, pero se han dejado influenciar por los oportunistas de “izquierda” que utilizan las tragedias ajenas para lucrar.
Estos “manifestantes” aprovecharon la marcha para roban comercios, vandalizar mobiliario público, quemar policías y lesionar fotógrafos y periodistas que, en mala hora sus jefes, los enviaron a cubrir un evento que ya sabían saldría mal.
La marcha realizada, dizque, en conmemoración de los hechos ocurridos el 2 de octubre de 1968 solo sirvió de pretexto para distraer a la opinión pública de los escándalos de corrupción y robo al patrimonio de mexicanos por parte de funcionarios de Morena, que a diario se dan a conocer, y para que los anarcos cometieran delitos.
Asaltos, destrucción a manos de un grupo violento de manifestantes que se dicen del “Bloque negro”, quienes se ensañaron contra elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, fotógrafos y reporteros que documentaban la marcha, marcó esta “conmemoración”.
Imágenes que circulan por las redes sociales dan cuenta de los hechos de violencia y destrucción que perpetraron grupos de personas vestidas de negro y con la cara cubierta, quienes lanzaron bombas molotov a los pies de los uniformados, parte de su cuerpo que no cubrían con el escudo; varios de los policías resultaron con los pies quemados.
Pero, los ataques no fueron solo a policías, además reporteros gráficos fueron golpeados, algunos de gravedad, entre ellos están: Ramkar Cruz de N+, Nicolás Corte de Publimetro y David De Olarte de la Prensa, aunque se desconoce si alguno fue trasladado; hay versiones de que comunicadores lesionados no fueron trasladados porque las autoridades dieron prioridad a policías para llevarlos a hospitales.
En otro caso un fotógrafo de Obturador denuncia que la policía lo despojó de su celular y luego lo golpeó
Las imágenes difundidas dan cuenta de agresiones con bombas molotov a policias, algunos de los cuales fueron despojados de sus escudos y prendas policiales, en medio de esta violenta marcha.
Como plaga de langostas, los anarcos destrozaron cortinas metálicas o escaparates de vidrio para robar desde papitas y refrescos, hasta joyería que, dicen los afectados, valuadas en millones de pesos. Son más de 10 joyeros los afectados y quienes esperan que la autoridad en Ciudad de México responsa por el vandalismo y robo de que han sido víctimas.
De manera extraoficial, se asegura que dos elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana murieron en el hospital debido a las quemaduras que sufrieron por las bombas molotov, que lanzaron los manifestantes contra ellos. Información por confirmar.
¿Y la autoridad? bien, gracias, no tuvo la capacidad de dar la orden de detener a todo aquel que provocara disturbios, daños al mobiliario público y privado, que pusiera en peligro a uniformados y ciudadanos, que robara. ¿Será porque estos delincuentes están a su servicio y utilizaron el 2 de octubre para distraer a la opinión pública? Usted, amable lector, saque sus conclusiones.
Fotos: Especial

