Icono del sitio DE REPORTEROS

Policías de la CDMX secuestran perro y piden rescate

Es tal la situación de inseguridad en la Ciudad de México que hasta los perros están siendo objeto de secuestro. Parece de risa, pero no lo es. Este martes se dio a conocer que un comandante de Cuadrante de la Secretaria de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México exigió 2 mil 500 pesos en efectivo para liberar a Hades, un perro pitbull. Al final, el rescate se pactó en 300 pesos y el pitbull pudo regresar a su hogar.

Esto sucedió en la colonia Atlampa, en la alcaldía Cuauhtémoc, cuando el uniformado encontró al can en la calle y lo subió a su patrulla, donde lo tuvo «privado de la libertad» por seis horas, desde las 11:00 de la mañana hasta las 17:00 horas.

De acuerdo a información difundida, el pitbull se salió por la ventana del departamento en el que vive con la familia García, sin que sus dueños se dieran cuenta. Ya en la calle, Hades fue visto por el uniformado y como es un perro amigable, el policía Noé López Salinas, del sector Buenavista, aprovechó la oportunidad para atrapar al can y subirlo a la parte trasera de la patrulla MX-310-C1, que conduce, y se lo llevó.

Cuando los dueños del perro se dieron cuenta de su desaparición, salieron a buscarlo durante horas por la zona, hasta que un joven les informó que un policía se lo había llevado. Ya con ese dato, la familia empezó a buscar al uniformado hasta que encontraron a otro policía y este lo localizó por teléfono y les pasó el móvil a los angustiados dueños del can para que hablaran con el presunto secuestrador.

El agente López Salinas contestó y les dijo que había encontrado al perro en la calle y que por eso se lo había llevado a la perrera de Xochimilco, donde lo sacrificarían de inmediato, pero en un acto de «benevolencia», el policía les dijo que les ayudaría asegurándoles que iba a pagar 2 mil 500 pesos para que ya no lo mataran, y que era necesario que le entregaran el dinero de inmediato, en cuanto les regresara al peludo.

Los dueños del animal le dijeron al uniformado que no tenían esa cantidad, pero que buscaría qué hacer, solo que se los regresara. En minutos el uniformado ya estaba en la unidad habitacional con el can, por lo que la familia le dijo que no tenían esa cantidad y el policía les hizo una rebaja, ya para entonces solo pedía mil 700 pesos. «Él y otro policía nos decían que ya había pagado y que si lo quería de regreso, que les pagáramos», dijo uno de los dueños del perro.

 

Y mientras la familia negociaba con los policías, el perro permanecía «detenido» en la parte trasera de la patrulla; al final uno de los integrantes de la familia García le dio 300 pesos a los policías y solo así entregaron a Hades.
La familia García analiza la posibilidad de presentar una denuncia contra los agentes secuestradores de perros.
Fotos: Especial
Salir de la versión móvil