La diputada pugna porque se preste ayuda profesional a las mujeres
La actualidad mexicana exige que el Estado priorice su atención en el tema de la violencia de género, pues en los últimos años fue vertiginoso el incremento de mujeres violentadas, lo que a su vez constituye un factor que impulsa además trastornos emocionales severos que pueden derivar en otras afectaciones.
En consecuencia, es indispensable abordar el tema de los Derechos Humanos como un elemento primordial para que las personas gocen de una vida digna, así lo expuso la diputada, Guadalupe Aguilar Solache frente al Pleno del Congreso de la Ciudad de México durante la Sesión de este martes, donde presentó una iniciativa que busca reformar el Artículo 14 de la Ley de Salud Mental de esta capital, para garantizar que todas las mujeres reciban atención especializada.
Ello, lamentó la Vicepresidenta de la Comisión de Igualdad y Género, contraviene las prioridades que dice tener la Ciudad de México, donde se pretende garantizar el derecho a la salud en el más alto nivel.
Y es que para la legisladora, la violencia de género no afecta sólo a un grupo social, pues en realidad impacta a más de la mitad de la población nacional.
Por lo tanto, enfatizó, el cambio social que se vive exige que las mujeres, con todas sus diferencias, se sitúen en el centro de las transformaciones que buscan reformular el significado de los Derechos Humanos, ya que su definición y su ejercicio no deben separarse de la vida concreta de las personas.
La violencia hacía a las mujeres, sostuvo, es un factor de riesgo para sufrir trastornos mentales que lleven a las mujeres a padecer cuadros depresivos, toxicomanía, actos autodestructivos e incluso, intentos de suicidio.
Estos síntomas se agravan cuando a las mujeres se les impide exponer su situación, se duda de su palabra o no se atienden sus necesidades de seguridad; por lo que deben enfrentar solas al agresor pues no existe un sistema de reparación del daño.
Las mujeres que han sido víctimas de abusos físicos o sexuales presentan tasas más elevadas de problemas de salud mental, embarazos no deseados y abortos inducidos y espontáneos, complementó.
Garantizar el respeto de los Derechos Femeninos es una de las más importantes obligaciones de Estado Mexicano.
El cumplimiento de este derecho no puede ignorar la violencia focalizada hacia las mujeres, mucho menos debe ser indiferente ante las diversas formas en que se manifiesta, puntualizó.
