Están a cargo de un equipo de psicólogos profesionales, que manejan con todo conocimiento el tratamiento innovador que se utiliza en estos recintos públicos.
¿Qué es un Centro Colibrí de Atención Integral a Personas Usuarias de Sustancias Psicoactivas? Es un lugar donde se aplica, gratuitamente, un innovador modelo terapéutico para tratar esta problemática como un asunto de salud pública, sin criminalizar a las personas y, por el contrario, permitirles tomar decisiones informadas para avanzar en su rehabilitación.
Es una estrategia de vanguardia internacional para atender el consumo problemático de sustancias psicoactivas, cuyos usuarios y sus familiares accederán a información amplia, detallada y clara, así como a estrategias de autocuidado y de cuidado colectivo para avanzar en su recuperación. También tienen acceso a actividades deportivas, culturales y recreativas para que puedan reconectarse a la sociedad.
El pasado 22 de enero, la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, anunció el inicio de operaciones del primer Centro Colibrí, ubicado en la unidad habitacional La Colmena, de esta demarcación, y dio a conocer que en el transcurso del presente año se irían poniendo en operación otros Centros hasta acompletar 10. Al momento, ya son siete los Centros que abrieron sus puertas.
De acuerdo a estudios realizados por la administración de la alcaldía, encabezada por Clara Brugada, de los cerca de 2 millones de habitantes de Iztapalapa, 23 por ciento consumen sustancias psicoactivas, principalmente alcohol, mariguana o solventes; 63 por ciento de jóvenes ha fumado tabaco y 42 por ciento ha ingerido bebidas alcohólicas.
En cuanto a la población de 12 a 65 años de edad, ésta ha consumido al menos una vez en la vida sustancias psicoactivas, y de las personas que las emplean, sólo 13 por ciento presentan usos problemáticos.
Las cifras muestran la importancia de comenzar el funcionamiento de los Centros Colibrí, por lo que desde enero pasado inició la atención a las personas que padecen un uso problemático, a quienes ya era impostergable dar atención junto con sus familiares, que suelen ser los más afectados. La terapia se ha efectuado con la aplicación estricta de las medidas preventivas para evitar contagios.
El primer Centro Colibrí, ubicado en el Centro Comunitario de la Colmena, donde beneficia directamente a los habitantes de esta unidad habitacional y también a los de la Ermita Zaragoza, entre otras de la zona norte de la demarcación, en la colindancia con el Estado de México.
El segundo en Tezontli
El segundo se inauguró el 30 de enero pasado, y se ubica en la Utopía Tezontli, ubicada en el barrio de San Antonio, en San Lorenzo Tezonco, que cuenta con espacios nuevos y dignos para llevar a cabo pláticas informativas, sesiones terapéuticas individuales y grupales y con instalaciones deportivas, culturales y recreativas que sean útiles a las personas que reconocen tener problemas con el uso de sustancias psicoactivas para reintegrarse a la sociedad.
El tercero en San Miguel Teotongo
Clara Brugada indicó que el tercer Centro Colibrí se ubica en la Utopía Teotongo, en el cual se atiende a personas de múltiples colonias de la zona norte de la Sierra de Santa Catarina. Este centro sólo está abierto al público, dada la urgencia e importancia de tratar a las personas con problemas en el consumo de sustancias psicoactivas y de prevenir que quienes las usan, aún sin conflicto, caigan en éste.
El cuarto está en la Utopía Ollini
El 15 de febrero pasado, la alcaldesa inauguró el cuarto Centro Colibrí se ubica en la Utopía Ollini, del Deportivo Francisco I. Madero, donde además de las instalaciones culturales, deportivas y recreativas, en la Utopía se han alojado animales de distintas especies que enriquecen el ambiente para el tratamiento terapéutico que se ofrece, afirmó la alcaldesa.
En este Centro Colibrí se da atención a habitantes de las colonias aledañas a la Cabeza de Juárez y al Cerro del Peñón. La Utopía Ollini se ha convertido en hogar, en algunos casos definitivo y en otros temporal, de especies como escarabajo polinizador, mariposas, avispa, abeja, una garza abejorro, patos de collar, halcones, aguilillas, gorriones, pájaros carpinteros y golondrinas, que aparte de embellecer este gran complejo ayudan a generar un ambiente propicio para la terapia de quienes sufren por las adicciones, de otras personas que requieren rehabilitación y en general de todos los visitantes.
El quinto está en la Utopía Papálotl
El quinto Centro Colibrí entró en operación el pasado 22 de febrero en la Utopía Papálotl, en la colonia Reforma Política, al pie de la sierra de Santa Catarina, donde también beneficia directamente a habitantes de Buenavista, Citlalli, Palmitas, Xalpa, Lomas de Santa Cruz, los pueblos de Santa María Aztahuacán y Santa Cruz Meyehualco, entre otras.
Hasta 2020 la población de Iztapalapa carecía de espacios públicos para la atención al consumo conflictivo de drogas y alcohol, pero a partir de 2021 comenzó la apertura de los Centros Colibrí en las colonias con mayor incidencia de este problema de salud.
El sexto abrió sus puertas en la Utopía Atzintli
El 28 de febrero, Brugada Molina inauguró el sexto Centro Colibrí, ubicado en la esquina que forman la calzada Ermita Iztapalapa y la avenida de las Minas, el cual beneficia directamente a miles de habitantes de diversas colonias de la sierra de Santa Catarina y también de la zona baja, por ejemplo “a esta inmensa colonia que es Xalpa”, pero también a Citlalli, Barrancas de Guadalupe, Tenorios, Teatinos, Lomas de la Estancia, la segunda ampliació0n de Santiago Acahualtepec y Santa María Aztahuacán, dijo la funcionaria.
En la Utopía Atzintli, hay un equipo de personas dispuestas a apoyar a quienes sientan que tienen consumo problemático de sustancias psicoactivas. Es “un lugar donde se tiene modelo distinto de atención al tema de las drogas que va por el camino de la reducción de daños, con talleres, pláticas y asesorías sobre cómo trabajar este tema”.
El séptimo está en Villa Franqueza esquina Tizoc
La alcaldesa Clara Brugada Molina abrió el séptimo Centro Colibrí en la zona más poblada de la demarcación, conformada por las colonias Desarrollo Urbano Quetzalcóatl y La Polvorilla, donde beneficia también a los habitantes de Mixcóatl, La Magueyera, Insurgentes, El Triángulo, El Chamizal y Hank González.
Al igual que en los primeros seis Centros Colibrí que ya están en funcionamiento, el séptimo estará a cargo de un equipo de psicólogos profesionales, que manejan con todo conocimiento el tratamiento innovador que se utiliza en estos recintos públicos para atender a las personas que tienen un consumo problemático de sustancias psicoactivas, así como a sus familiares.
Dos Centros ya cuentan con certificación
El pasado 28 de febrero, la alcaldesa informó que los Centros Colibrí de la unidad habitacional La Colmena y el ubicado en la utopía Papálotl, recibieron la certificación del Instituto para la Atención y Prevención de las Adicciones (IAPA), organismo rector en esta materia en la Ciudad de México, luego de verificar que las instalaciones de esos dos recintos y su operación cumplen con la normatividad vigente.
Entre las estrategias que en su momento planteó la Comisión de Derechos Humanos y que hoy aplica la Alcaldía Iztapalapa están: lograr que las políticas encaminadas a reducir daños por las drogas sean de fácil acceso y hoy hay seis centros en Iztapalapa que buscan que la gente tenga fácil acceso para hacerse acompañar de especialistas.
También desarrollar estrategias diferenciadas para niñas, niños, jóvenes, adolescentes, mujeres y hombres que requieren de la atención. Se necesita acercar los protocolos de reducción de daños a las poblaciones jóvenes y sobre todos en grupo de atención prioritaria. Afirmó que la Comisión acompaña con mucha disposición estos Centros Colibrí porque buscan aplicar las acciones planteadas en el informe especial de 2013.
El modelo terapéutico que implementaron se basa en la reducción de riesgos y daños, que consiste en impulsar a las personas a tomar decisiones informadas, no parte de un esquema prohibicionista, sino que desestigmatiza y descriminaliza a las personas, a las que se les respeta su derecho al libre desarrollo de la personalidad. El objetivo es prevenir el consumo problemático y redignificarlas.
La abstinencia no se plantea como condición, sino como una opción de tratamiento, partiendo de la premisa de que no todo uso es abuso, por lo que no todas las personas usuarias de sustancias psicoactivas tienen una problemática a tratar.
Sostuvo la alcaldesa que el equipo de profesionistas a cargo de estos Centros Colibrí tiene la premisa de cambiar la visión para atender esta problemática, pues “mientras sigamos discriminando y ubicando el problema de uso de sustancias psicoactivas como drogas desde viejos puntos de vista no vamos a avanzar, tenemos que actualizarnos con modelos muy modernos, que den resultados, respeten derechos humanos y no sean coercitivos.
Fotos: Cortesía
