En su momento, Monreal argumentó que su entonces colaboradora andaba de vacaciones.
El 23 de julio de 2015, Benelly Jocabeth Hernández Ruelas, María Lizeth Semenow Ayala y Sofía Olvera Castro fueron detenidas en el Aeropuerto Internacional de Tapachula, Chiapas, con más de un millón de pesos en sus maletas, dinero del que no supieron explicar procedencia y destino, sólo que eran colaboradoras del entonces recién electo delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal Ávila.
Las mujeres se disponían a abordar un vuelo privado con destino a Toluca, al término de los comicios intermedios registrados en ese año en Chiapas, pero antes de abordar les descubrieron el millón de pesos en efectivo, distribuido en sus maletas. Elementos de la entonces Procuraduría General de la República (PGR) hoy Fiscalía (FGR), realizaron la detención y puesta a disposición del MP, posteriormente fueron dejadas en libertad sin explicación alguna.
En su momento y, como es costumbre en todos los integrantes de MORENA cuando los sorprenden en actos de corrupción, Ricardo Monreal Ávila dijo reconocer plenamente a Benelly Jocabeth Hernández Ruelas, a las otras dos no porque, supuestamente, en su campaña participaron 150 colaboradores; en ese momento negó tener conocimiento de la detención de las mujeres.
En cuanto al dinero, aseguró que se trataba de un infundio derivado de las denuncias interpuestas días antes contra el exjefe delegacional Alejandro Fernández y Fernando Mancera, director de Mercados.
Aseguró que, en ese momento, las mujeres “están de vacaciones. Yo no miento y en su caso particular de Hernández Ruelas, es una jovencita ejemplar, maestra y que está de vacaciones”. Pero, el morenista nunca explicó el origen y destino de la millonaria cantidad de dinero que las mujeres trasladaban, solo insistió en que ellas estaban de vacaciones.
Pues resulta que ahora, Benelly Jocabeth Hernández Ruelas es candidata por MORENA para diputada federal por Zacatecas.
¿Realmente esta candidata cumple el perfil para un cargo público?, sobre todo ahora, con la persecución que López Obrador ha emprendido contra candidatos y funcionarios de la oposición que, supuestamente, cometieron diversos “delitos” en el pasado, con la clara intención de sacarlos de la contienda para favorecer a sus leales. La misma vara con la que mide a los opositores, debe usar para medir a gente de su partido que tendrán el destino no sólo de leyes y recursos, sino de los ciudadanos que votan por ellos y que, supuestamente, representan.
Fotos: Especial