Con apenas 18 años de edad, en un estado (Sonora) donde el crimen no respeta edad, sexo ni posición social, una joven salió a las calles a manifestarse, en el día internacional contra la violencia hacia las mujeres y momentos después muere en ataque armado.
Este violento y aberrante suceso ocurrió en Guaymas, Sonora, localidad que como muchas otras agregó su participación a las movilizaciones nacionales.
La paradoja de este hecho es que la joven y otras mujeres que se sumaron a la movilización lograron una foto con la alcaldesa Karla Córdova, sería la última en vida.
Luego el palacio municipal fue atacado a tiros por un comando armado de civiles, que sin importar nada lanzaron ráfagas de fusiles de asalto contra la edificación.
En este ataque murió un escolta del titular de seguridad, un presunto sicario y la joven Marisol “N” activista proderechos de la mujer.
La alcaldesa colgó un mensaje a la familia de la joven caída.
La explicación que se da es que en el lugar estaba el Secretario de Seguridad y la alcaldesa, pero que iban por el funcionario y no por ella, mientras que el restos de personas que perdieron la vida habrían sido víctimas colaterales.
