OPINIÓN
Por Guillermo Robles Ramírez
Existe una creencia equivocada, por parte de la población en general, sobre la responsabilidad de las instituciones educativas de nuestro país. Las carencias que llegan a tener las escuelas públicas, resultan más fácil culpar a las autoridades locales que a quienes realmente corresponden.
Lo anterior viene muy claro en la Ley General de la Educación, en el segundo párrafo del Artículo 123: “Las autoridades educativas federales y de las entidades federativas, están obligadas a incluir en el proyecto de presupuesto que sometan a la aprobación de la Cámara de Diputados y de las legislaturas locales, los recursos suficientes para fortalecer las capacidades de la administración escolar”.
Esto lo traigo a colación por las recientes eventualidades que conllevó la reciente pandemia ante la necesidad del confinamiento total, así como su actual reactivación de actividades, incluyendo las clases presenciales de todo el sistema educativo.
Durante este proceso observamos la falta de infraestructura en el sistema educativo público de una plataforma de conectividad de Internet, siendo esta la principal necesidad que sufrieron muchos estudiantes de las escuelas públicas. Y posterior a las etapas críticas de la pandemia, las instituciones educativas públicas se han visto afectadas de muchas maneras y siendo objetivos estas necesidades son 100 por ciento responsabilidades de los Gobiernos Estatales y Federales, como lo señalé anteriormente.
El limitarse solamente a una obligación no tiene nada malo, como tampoco puede ser criticable.
Es por eso que el alcalde de la capital de Coahuila, José María Fraustro Siller; es de reconocerle que el compromiso con los saltillenses no tiene límites, mostrando una actitud proactiva con La Atenas de México, y promoviendo esa educación de la que se habla de ser universal, obligatoria, inclusiva, gratuita y pública; firmó un convenio para la instalación de internet de alta velocidad en 26 centros comunitarios de Saltillo.
Dentro de la planeación definida desde principio de la Administración, Chema Fraustro Siller, y con convicción de que la educación es el motor de desarrollo de la economía, está creando una política de que la educación en los municipios no se trata de un asunto menor, sino de colaboración y sinergia con las autoridades estatales y federales, responsables de este rubro de la sociedad.
La mejora de la calidad educativa de los saltillenses, no es limitativa para el Alcalde saltillense, sino dentro de su plan de trabajo es ambicioso para el bien de Saltillo.
Para José María Fraustro Siller, el deslindarse del rubro de la educación no es una opción, sino que se trata de una colaboración con el Gobierno del Estado de Coahuila, en donde más allá de los discursos políticos, los hechos hablan por sí mismo.
Por lo pronto, a sus más de 120 días como alcalde de la ciudad de Saltillo, une esfuerzos con autoridades estatales y algunas instituciones universitarias para incluir el aprendizaje de inglés como un segundo idioma de manera gratuita y cuya plataforma será en línea.
También se donó terrenos a favor de la Secretaria de Educación para la construcción de nuevas escuelas, apoyando a los proyectos del Gobernador, Miguel Ángel Riquelme Solís, para la educación de la Región Sureste.
José María Fraustro Siller, define con los saltillenses que, dentro de su plan de desarrollo del Ayuntamiento de Saltillo, existen planes debidamente articuladas, realistas, y concretas, colocando a la educación en un lugar central dentro de la política municipal de Saltillo. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org
http://intersip.org/2022/05/08/la-educacion-en-saltillo/
