TEXTUAL-es
J. Adalberto Villasana
Es cuestionada la llegada de Leticia Ramírez Amaya al frente de la Secretaría de Educación Pública (SEP), por su perfil académico y laboral, pero, creo no es quién esté sino para qué está ¿Trabajará para mejorar el sistema de enseñanza en México?
¿Servirá al pueblo mexicano? O responderá a los intereses de partido, de grupo o personales ¿Cuál es el objetivo de la educación pública en la 4T?
Como se recordará, los conquistadores alfabetizaron al español a los pueblos originarios para evangelizarlos, muchos años después, se creó la Secretaría de Educación Pública para adoctrinar a las nuevas generaciones en las bondades de la Revolución Mexicana.
La SEP se creó el 3 de octubre de 1921. Con el propósito esencial de crear condiciones que permitieran asegurar el acceso de todos mexicanos a una educación de calidad, en el nivel y modalidad que la requieran y en el lugar donde fuera demandada.
Ahora, hay que saber qué sucedió con el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica de 1992, qué resultó del Programa Nacional de Educación 2001-2006, qué pasó con la Reforma Integral de la Educación Básica de 2011.
El cambio en educación debe basarse en la realidad de un México con grandes diferencias.
Leticia Ramírez Amaya, es profesora de educación primaria por la Benemérita Escuela Nacional de Maestros. Participó en movimientos sociales de izquierda como el Movimiento Urbano Popular y la Organización de Izquierda Revolucionaria Línea de Masas.4
Pero, no es la primera egresada normalista que está al frente de la SEP, Moisés Sáenz Garza, estudió en la Escuela Normal de Jalapa, donde obtuvo el título de maestro. Impulsó reformas en la educación pública -entre las que destaca la creación de la educación secundaria-, entre otras.
Ahora el punto es: ¿Le interesa al gobierno de la 4T la educación pública? ¿Quiere hacer algo por la enseñanza de calidad?
¿Cuál es el plan nacional de educación del actual gobierno?
Hay que saber en qué situación se encuentra el Sistema Educativo Nacional y fijar objetivos claros a corto, mediano y largo plazo.
Más allá de las ideologías se debe dotar a los alumnos del conocimiento elemental, y que desarrollen destrezas y habilidades para transformar sus entornos y la realidad del país. Debe ser la educación de calidad la palanca de desarrollo de la nación.
Como titular de la SEP José Vasconcelos Calderón, apuntó: «Al decir educación me refiero a una enseñanza directa de parte de los que saben algo, en favor de los que nada saben; me refiero a una enseñanza que sirva para aumentar la capacidad productiva de cada mano que trabaja, de cada cerebro que piensa […]Trabajo útil, trabajo productivo, acción noble y pensamiento alto, he allí nuestro propósito […] Tomemos al campesino bajo nuestra guarda y enseñémosle a centuplicar el monto de su producción mediante el empleo de mejores útiles y de mejores métodos. Esto es más importante que distraerlos en la conjugación de los verbos, pues la cultura es fruto natural del desarrollo económico […]».
Tal es así, que la educación siempre ha sido vista como la palanca de desarrollo de la nación, desde cualquier ideología.
La nueva Secretaria de Educación Pública debe llegar con un plan de trabajo que contemple una enseñanza de calidad, fortalecimiento de la planta docente y administrativa, escuelas dignas y una planeación educativa clara: ¿enseñar para qué? ¿aprender para qué?
Textualmente hay que decirlo: Es necesario el rescate de la educación pública en México, pero éste requiere de la participación firme y decidida de profesores, autoridades, legisladores, padres de familia, alumnos. Porque la solución no está en unos cuantos, urge un diálogo nacional con todos los actores; e insisto, lo peor sería quedarnos como estamos, luego de tanto relajo.
En Twitter @TXTUALes
