Son elaboradas artesanalmente, novedosos diseños como calaveritas, pan de muerto y ofrendas.
Cada año, el Día de Muertos en Xochimilco, las familias arreglan las ofrendas elaboradas con flores aromáticas de cempasúchil, alhelíes, nubes, gladiolas y crisantemos. Entre ellas, resalta las llamas de los pabilos de las ceras parpadeantes que se esconden entre el humo oloroso de la resina que se consume en el sahumador de barro.
La mayoría de estas velas son hechas artesanalmente en la demarcación. Para la vendimia que aumenta la demanda en esta época, se preparan semanas antes, comenta Diana Hernández Heredia de la sociedad cooperativa familiar «Grupo Heredia Frutas».
Asegura que desde hace tres años, con el apoyo de la Alcaldía Xochimilco con equipo, herramientas, asesoramientos y capacitación, actualmente pueden elaborar más de dos mil 800 piezas a la semana; “anteriormente, sólo elaborábamos 50 piezas por semana de forma manual».
Por Día de Muertos, los artesanos de Santiago Tepalcatlalpan, además de las tradicionales velas, realizan novedosos diseños como calaveritas, pan de muerto, ofrendas aromáticas de chocolate, frutales, cítricos, inciensos y florales hasta piezas originales con frutas y naturaleza deshidratada como el olivo, lavanda, romero, canela y guayaba.
Con nostalgia, recuerda que la idea de elaborar sus artesanías, fue de su abuela, quien, “cuando visitaban a los familiares fallecidos en el panteón, recolectaba la cera que quedaba de los cirios, la fundía y transformaba en veladoras», concluyó.
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