No se ha identificado que la institución bancaria haya dado a conocer la sentencia a la Bolsa Mexicana de Valores.
En sentencia definitiva, Juez condenó por responsabilidad civil a Actinver División Fiduciaria a pagar mil millones de pesos a Rafael Zaga Tawil por concepto de daños y perjuicios, así como cien millones de pesos por daños punitivos.
El pasado 14 de diciembre de 2022, el Juez Vigésimo Séptimo de lo Civil de Proceso Oral y de Extinción de Dominio en la Ciudad de México resolvió el juicio promovido por Rafael Zaga Tawil contra Actinver división Fiduciaria, en el que reclamó el pago de mil millones de pesos por incumplimiento de las obligaciones de Actinver como fiduciaria en el Fideicomiso 3201 creado en noviembre de 2017. Además, se condenó al pago de cien millones de pesos por daños punitivos.
En la sentencia, el juzgador resolvió que: “Actinver desplegó una conducta tan evidentemente reprochable y reiterada, que ameritó sentenciarla a pagar daños punitivos por no haber actuado bajo un imperativo de conducta honesta, diligente ni correcta, que es exigida a las personas para que quede excluida toda intención maliciosa”. Destacando que la condena por daños punitivos es inusual en México.
Un mes después de la notificación, no se ha identificado que Actinver haya reportado el hecho a la Bolsa Mexicana de Valores como lo obliga la Ley del Mercado de Valores.
El Juez concedió a Actinver un plazo de 5 días para cumplir voluntariamente con la sentencia, apercibiéndolo que, en caso de no hacerlo, la condena generará intereses a razón de un 6 % anual y se despachará ejecución en contra del banco condenado.
Aunque Actinver interpuso un amparo directo y obtuvo una suspensión después de exhibir una garantía de 71 millones 800 mil pesos, la sentencia sigue firme pues la suspensión otorgada solo evita que se embarguen los bienes o se utilicen medios establecidos en la ley para cobrar la cantidad demandada.
Antecedentes
En noviembre de 2017, Rafael Zaga Tawil (RZT) creó el Fideicomiso 3201 para inversiones personales y familiares, en el que Actinver fungió como institución fiduciaria y RZT como administrador, fideicomitente y fideicomisario. En febrero del 2020, Actinver le proporcionó a RZT facultades generales para pleitos y cobranzas, actos de administración y actos de administración en materia laboral.
En diciembre de 2017, el Fideicomiso 3201 creó el Fideicomiso 366 con el objeto de completar una inversión inmobiliaria con la familia El-Mann en Estados Unidos. En este último, el Banco Ve por Más (B X+) fungió como la institución fiduciaria y el Comité Técnico estaba formado por Moisés y André El-Mann.
El 20 de mayo de 2020, RZT se enteró que ese dinero había sido utilizado por los señores El-Mann para obtener un criterio de oportunidad de la Fiscalía General de la República. Es decir, contrario al objeto del contrato, dispusieron para beneficio propio el patrimonio del Fideicomiso 366 en el que el Fideicomiso 3201 era la única fideicomitente y fideicomisaria.
Por lo anterior, en noviembre de 2021, RZT en ejercicio de sus facultades para pleitos y cobranzas y representante del fideicomiso 3201 demandó en la vía ordinaria mercantil a BX+ y a los señores El-Mann.
La demanda se inició ante el Juzgado Cuarto Civil en la Ciudad de México quien decretó un embargo por mil millones de pesos en contra de André y Moisés El-Mann, por lo que se ordenó congelar los CBFIs de Fibra UNO y cuentas bancarias.
Ante esta situación y ostentándose como fiduciaria del Fideicomiso 3201, Actinver solicitó a un Juez de la Ciudad de México que decretara medidas cautelares en contra de RZT y le retirara el poder otorgado para representar al Fideicomiso 3201.
Esto derivó que el 27 de abril de 2022 y ante la falta de parte actora, porque RZT ya no tenía el poder requerido, un juez decretó el sobreseimiento del juicio promovido por Rafael Zaga Tawil en contra de André y Moisés El Mann Arazi, y, por lo tanto, frustró el derecho de reclamar la devolución y pago de los mil millones de pesos, beneficiando así de forma indebida a los dueños de Fibra UNO y perjudicando los intereses del fideicomitente y fideicomisario RZT.
Es por ello que RZT promovió un juicio oral mercantil en contra de Actinver Fiduciaria a quien reclamó una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados a su persona por haber obrado indebidamente en conflicto de intereses, beneficiando ilegalmente a los El-Mann, controladores de Fibra UNO, clientes principales de Actinver.
En su actuar, Actinver como fiduciario del Fideicomiso 3201, incurrió en responsabilidad civil, de acuerdo con los artículos, 391 de la Ley General de Títulos de Operaciones de Crédito, y 1912 del Código Civil Federal de aplicación supletoria en materia mercantil.
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