Por Pablo Chávez Meza / A21
EN CASO DE SER EL JOSÉ MARÍA MORELOS Y PAVÓN, ÉSTE YA NO DEBERÍA APARECER PORQUE FUE VENDIDO
Los secretarios de Hacienda o de la Defensa Nacional deben explicar qué significa que en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2024 (PPEF), en el rubro de Programas y Proyectos de Inversión, aparezca un apartado denominado “Adquisición de una Aeronave de Transporte Estratégico para uso Presidencial y del Estado Mayor”.
Mario Di Constanzo, consultor financiero, evidenció que en el PPEF, en la descripción que se da sobre este avión, se señala que es un “avión y equipo con un costo estimado del flujo amortizado del valor actual del avión (637.1 millones de pesos -mdp-) y equipo (560.7 mdp).
“El horizonte del arrendamiento (15 años) considera pagos anuales promedio de 45 mdp en operación y mantenimiento, más pagos anuales de arrendamiento entre 4.6 mdp y 451.4 mdp”, precisó.
De acuerdo con lo publicado en el PPEF, en lo referente a Programas y Proyectos de Inversión registrados con asignación de recursos en el 2024 para la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), con clave 12071320003, aparece la adquisición de una aeronave.
A decir del ex funcionario Federal no se precisa si se trata de un nuevo avión o son recursos para pagar el Boeing 787 “José María Morelos y Pavón”aprobado en la administración de Felipe Calderón, usado en la gestión de Enrique Peña y que fue vendido por el Presidente Andrés Manuel López Obrador a la República de Tayikistán.
En entrevista con A21, Di Constanzo comentó que esto aparece como una compra para el Estado Mayor con un costo por 6,370.9 millones de pesos, y por ello se pregunta si se trata de la compra de un nuevo avión para uso presidencial o hace referencia al Dreamliner que se vendió.
Indicó que en caso de que fuera lo segundo, se supone que el avión ya se vendió y ya debería estar liquidado, “ya no tiene porqué aparecer en el Presupuesto de Egresos de la Federación, porque está siendo un gasto”, dijo.
Como se recordará, en abril pasado, el Gobierno mexicano, a través del director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza Sánchez, informó sobre la venta del “José María Morelos y Pavón” por un monto de mil 659 millones de pesos, equivalentes a 92 millones de dólares.
Este monto, justificó el directivo, cumplió con el avalúo realizado por el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin).
El consultor financiero sostuvo que “si ya vendiste un avión, ya lo liquidaste, ya no tiene porqué a arecer en el PEF, porque está siendo un gasto; el PEF es un permiso que la Cámara de Diputados le da al Gobierno Federal para que gaste dinero y aquí estaría gastando todavía en ese avión que supuestamente ya se había vendido”.
Incluso, recordó que con el dinero de la venta del Avión Presidencial, el Presidente López Obrador ofreció construir dos hospitales. “Eso, dijo, tiene una doble implicación, primero que se seguiría pagando por un avión, lo cual puede constituir un daño patrimonial”, mencionó.
Explicó que sería un “daño patrimonial”, una “irregularidad muy grande” porque el avión se pudo haber vendido por debajo de su costo. “Cuando vendes algo que es del Gobierno, por debajo de su costo hay un daño patrimonial”.
“Cuando eres servidor público, no puedes disponer a tu antojo de los bienes del Gobierno, cuando llegas a vender un bien del Gobierno es el Indaabin quien le tiene que poner un valor y ese tiene que ser su valor de recuperación de mercado y si es por debajo cometes un daño patrimonial”, explicó.
Como Texcoco
Precisó que sería como el caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) que se canceló el proyecto, pero se siguen pagando unos bonos emitidos; y en el caso de la venta del avión, ese dinero se debió usar para el pago de la deuda del mismo.
Di Constanzo precisó que los recursos por la venta del B-787 debieron aparecer en el renglón de “Aprovechamientos” en los Informes de Finanzas Públicas de este año.
Puntualizó que un gasto que ya no es gasto no debería a parecer en el PEF.
Pero si no es ese el caso y se trata de la adquisición de un avión nuevo, que se explique de qué se trata, qué tipo de avión, cuánto va a costar.
“Me llama la atención que el propio presupuesto trae un costo de 6,370 millones de pesos, creo que la Sedena debería explicar a qué se refiere con todo ese costo, sí es lo que se pagó, sí es todo en lo que se ha invertido, etcétera”, aseveró.
Indicó que en el proyecto se describe un modelo de avión con características similares al “José María Morelos y Pavón”, de ahí que la Sedena debe explicar de qué se trata.
Por ello, dijo, en la Cámara de Diputados, en el periodo de análisis del PEF, la Comisión de Presupuesto puede solicitar una explicación a la Secretaría de Hacienda de por qué seguimos pagando un avión que ya se vendió o por qué requerimos un nuevo avión.
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Para DeReporteros