Para los niños de la colonia Obrera fue como día de Reyes la noche de este domingo, al recibir de manera inesperada juguetes que les dio la Alcaldesa, Sandra Cuevas, en el marco del la Posada Navideña.
El montaje del escenario, luces, pantallas, mesas de comida y juegos fue en dado momento tedioso, aunque a medida que avanzó la noche el lugar se
llenó de magia y sobre todo de niños que atraidos por la pista de baile iluminada la tomaron como espacio de juegos.
Ni siquiera la presencia de un grupo de jóvenes cantantes los hizo dejar su pasatiempo y mientras mamá disfrutada de los movimientos sexis de estos muchachos al microfono, los menores hicieron nuevos amigos y corrían de un lado a otro.
Cuando llegó la oportundiad de cantar los villancicos unos pocos fueron los afortunados de subir al escenario para pedir la clásica posada y al bajar fueron premiados con sendos globos con luces navideñas, aunque fueron los adultos quienes aprovecharon su estatura y se quedaron con ellos.
Esto no minó la legria de los chiquillos que continuaron sus juegos y de la mano de sus mayores pasaron a recoger sus platos de comida para luego formarse en la fila de la entrega de juguetes.
Así, poco poco uno a unos llegaron a la mesa de regalos y escogieron muñecos de acción, peluches, muñecas bolsas y balones para quienes así lo desearon.
En esta entrega la Alcaldesa, Sandra Cuevas, hizo una dinámica para lanzarles el balon a los niños y niñas que atentos buscaban que el esférico llegara a sus manos para luego dejar la fila felices.
Por las calles aledañas ya entrada la noche se pudo ver a grupos de niños que pateaban felices sus nuevos balones o mostraban los regalos recibidos, justo como si fuera día de Reyes.
Por la mañana del mismo día llevo a cabo la «Carrera del Pavo 2.5K»
