El PAN en la Ciudad de México tiene la misión de liberarnos del populismo y las mentiras que Morena.
• Luisa Gutiérrez reafirma su compromiso con el PAN, la militancia y con las luchas justas
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Los panistas estamos convencidos y, más que nunca, de que es tiempo de hacer realidad el cambio, el anhelo de una Ciudad y un país seguro y libre. No es una lucha fácil, pero es la más necesaria de todas.
No es una lucha rápida, pero es la más trascendental para los próximos años, aseguró Luisa Gutiérrez Ureña, ex coordinadora del GPPAN en el Congreso local y aspirante a dirigir el Partido Acción Nacional capitalino.
“Y, sobre todo, no es una lucha en la que podamos si quiera permitirnos en titubear. Ha llegado el comienzo, somos cambio y fuerza trascendente; juntas y juntos lograremos lo que nuestro destino dicta, vencer frente al más ruin de los adversarios, aquel dispuesto a hacer trampa, no respetar la voluntad democrática y destruir la transparencia y el Estado de Derecho”, destacó.
Gutiérrez Ureña, quien es también Consejera Regional del PAN CDMX, precisó que los valores que alguna vez fueron consideramos inquebrantables, hoy son débiles frente a los embates de quienes prefieren el silencio sobre el diálogo, la opacidad frente la transparencia, y la concentración del poder por encima de los contrapesos que garantizan detener los excesos y asegurar nuestra libertad.
“Pero es en estos momentos, en los que debemos encontrar la fuerza para no flaquear; esta Ciudad y este país que nos ha tomado décadas construir para respetar voluntades, no pueden ser destruidos de un plumazo y consecuencia del capricho de un solo hombre, de un solo partido”, apuntó.
La panista expresó que las instituciones son el resultado de lucha de nuestros padres y abuelos. “Nuestra responsabilidad histórica hoy nos exige, como herederos de ese legado panista, protegerlas frente al autoritarismo y la regresión democrática; se trata de levantar la voz cuando el diálogo se sustituye por la imposición y no callar frente a la injusticia, frente a la corrupción y frente al abuso de poder”.
Añadió que el silencio, en esos casos, nos convertiría en sus cómplices. Afortunadamente nosotros no somos de los que callan. Nosotros somos de los que creen que la verdad debe prevalecer, aunque sea incomoda, que la justicia es un principio no negociable, y que la dignidad humana debe ser defendida a toda costa.
“Hoy, más que nunca, necesitamos ser esos valientes y por ello, hoy refrendo mi compromiso con el PAN, con su militancia, con las y los capitalinos, con las luchas justas, con las y los valientes, con los que están dispuestos a andar el camino, aunque largo y complicado, para hacer lo correcto, para luchar por las causas que valen la pena”, acotó.
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