Vergonzosa escena protagonizó un empleado del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, en la estación Sevilla, donde agredió a un vigilante y hasta le tiró el teléfono móvil de un manotazo, solo porque le pidió identificarse ya que había pasado por la puerta que está junto a los torniquetes.
De acuerdo con el video que nos hicieron llegar, el empleado del STC Metro, al parecer del área administrativa, ingresó a la estación Sevilla por una puerta lateral y cuando el elemento de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) le solicitó que se identificará, se negó.

Sobrado de soberbia y prepotencia, el empleado del Metro se negó en reiteradas ocasiones a identificarse argumentando que el uniformado tiene la obligación de saber quién es.
El policía le indicó que solo estaba cumpliendo con su trabajo y solicitó a su jefe inmediato acudir al punto (andén) donde el prepotente empleado del STC Metro estaba con él. El trabajador del Metro insistía en que el uniformado dejara de grabarlo.
Frente al superior del uniformado, el empleado del STC empezó a mentir diciendo que el policía lo había agredido, y ahí mismo le tiró un golpe al elemento, tirándole su teléfono celular.
Desconocemos en qué terminó la discusión, aunque el empleado del Metro debió ser presentado ante el Juez calificador por vejaciones a la autoridad.
Acerca de las sanciones por vejaciones
En la CDMX, las vejaciones a la autoridad se sancionan principalmente a través de la desobediencia a mandatos legítimos y, en casos más específicos, como el insulto a la autoridad, según el Código Penal Federal y los Reglamentos de Tránsito. Las sanciones incluyen desde multas económicas y trabajo comunitario hasta penas de prisión y restricción de derechos, dependiendo de la gravedad de la conducta y la naturaleza de la autoridad.
Resistencia de particulares:
La resistencia a cumplir una orden legítima de una autoridad pública es un delito que puede acarrear consecuencias penales serias, incluyendo prisión y multas.
Foto: tomada del video

