Sebastián Godínez Rivera
El mundo ha cambiado tanto en las últimas décadas al punto que se han roto estereotipos y cánones impuesto por varios años. Por ejemplo, ahora hay jefes de Estado que son abiertamente homosexuales como Igor Luksic, Primer Ministro de Montenegro. Sin embargo, un tema que ha sido recurrente en la opinión pública es el de los presidentes que se casan con mujeres mayores.
A pesar de que románticamente la frase “no importa la edad” es popular entre todos los niveles de la sociedad, lo cierto es que las esposas que son mayores ha despertado inquietud, morbo e interés en varias partes del mundo. La historia más conocida recientemente es la del presidente francés, Emmanuel Macron y su esposa Brigitte Macron; el hoy mandatario galo se enamoró de ella cuando tenía 15 y ella 39, entonces la relación era de alumno y profesor.
Brigitte tiene tres hijos y se divorció de su esposo cuando Macron tenía 17 años, entonces comenzaron a tener una relación. No obstante, ambos cobraron notoriedad durante los comicios presidenciales de 2017 y fue ella quien dio a conocer al entonces candidato de centro derecha, con su historia de amor. Además, en el terreno político se habla que ella tiene mucha influencia en los discursos del presidente; otro dato curioso es que cuando llegó al Palacio del Elíseo, rechazó el título de Primera Dama y pidió que se le nombrara “cónyuge del Jefe de Estado”.
Aunque la sociedad ha evolucionado y considera como nimiedades la edad, esto no quiere decir que estén exentos de críticas. En el caso del matrimonio Macron, las burlas y ataques diciendo que Brigitte es transgénero; las burlas por la diferencia de edades y hasta las difamaciones son muestra de que algunos sectores se niegan a reconocer los cambios que vivimos como sociedad. Mientras que para otros es normal,
Otro caso emblemático que no ha sido tan sonado por las pasiones que despierta, es el del hoy monarca británico Carlos III y la reina consorte, Camila. En Reino Unido, la figura del rey actual es polémica, puesto que muchos británicos recuerdan con cariño a Diana de Gales “Lady Di”. Empero, es importante recordar que antes de contraer matrimonio, el entonces príncipe Carlos se enamoró de Camila Parker Bowles, quien es un año mayor que él y esto despertó las alertas en el Palacio de Buckingham.
A principios de los años ochenta cuando Margaret Thatcher era Primera Ministra, Carlos vivía enamorado de Camila, ella entonces de mayor edad y divorciada generaba muchos cuestionamientos para la Familia Real. Todos conocemos la turbulenta historia de los príncipes de Gales y las infidelidades hacia Lady Di, no obstante, fue hasta 2005 cuando Camila y el heredero al trono pudieron casarse.
A pesar de que el recuerdo de Diana sigue vivo en el inconsciente británico, Carlos y Camila después de décadas consolidaron lo que en los años ochenta había iniciado una disputa interna entre la familia real. Al punto que Carlos III pidió que cuando él asumiera el trono, su esposa tuviera el título de reina consorte y no uno menor como ocurrió con su padre, el príncipe Felipe duque de Edimburgo.
Sin embargo, en la realeza existen diversos casos donde mujeres de mayor edad se han casado con hombres menores. En los anales de las familias reales están Catalina de Aragón, primera esposa de Enrique VIII, quien era seis años mayor que el monarca inglés; o Megan Markle y el príncipe Harry, ella es tres años mayor que él por mencionar algunos casos. Ya sea por la antigüedad o los nuevos tiempos, la edad ha perdido relevancia como un tema que sirva para señalar a quienes salen o se casan con mujeres mayores.
Estos casos son de los más emblemáticos, puesto que en ambos hay un trasfondo de oposición ya sea por parte de la sociedad o la familia quien aspiraba a mantener los cánones de ese momento. Además, hay un punto relevante que muchas veces es olvidado y es que al ser decisiones de la vida personal, estas no necesariamente influyen en el ejercicio del poder o en la toma de decisiones, lo cual hace que pueda ser un tema sin importancia para algunos, pero central para otros.
Durante siglos el tema de la edad ha sido ignorado si el hombre es mayor que su esposa o pareja, puesto que es visto como un símbolo de madurez, no obstante, cuando los papeles se invierten como en los casos líneas atrás, estos tienden a generar polémica. Las sociedades en el mundo se jactan de progresistas, pero hay ciertos temas que sacan a relucir algunas fobias que no deberían de existir; por ejemplo, si es divorciada, si es mayor, si tiene hijos o si es madre soltera; la presión social muchas veces logra mermar decisiones.
De
Para DeReporteros
