En México se debe poner énfasis en el valor que tiene la radio pública en la sociedad actual porque se ha constituido en un espacio donde se difunde información, educación y cultura, aseguró la directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Carola García Calderón.
Es una educación informal la que brinda, pero eso atrae la atención para explorar otros contenidos vinculados con la historia y la cultura, por ejemplo. Tiene la responsabilidad “de fomentar el conocimiento, el debate constructivo, la conciencia social; uno de sus aspectos claves ha sido llegar a comunidades marginadas con escaso acceso a otros medios de comunicación”, argumentó.
Con motivo del 35 aniversario del programa “El fin justifica @ los medios”, de Radio Educación, y de los 100 años de la primera transmisión de radio pública en México a cargo de dicha emisora, García Calderón añadió:
“En un contexto neoliberal como el actual de globalización, en el que las plataformas digitales dominan el consumo mediático, la radio sigue siendo en ciertas comunidades un bastión de contenido plural y accesible, porque ofrece una programación distinta, en muchos casos, a la de estaciones comerciales”.
Además, la de carácter público no tiene como fin generar ganancias, y en sus inicios está el planteamiento de servir a la sociedad con contenidos que contribuyan a la cultura y al bienestar colectivo.
“En el cuadrante de la radio mexicana priva la programación y los contenidos de los medios privados muy vinculados a la publicidad, a la transmisión de música, al interés comercial. En contraste, la radio educativa de servicio público tiene una propuesta de fomentar el aprendizaje a lo largo de la vida”, destacó.
Buscar formatos innovadores
En el auditorio “Ricardo Flores Magón” de la FCPyS, la también especialista en Televisión Educativa y Cultural por el Instituto Nacional del Audiovisual en París, Francia, indicó que uno de los principales desafíos de la radio pública en México es cómo captar la atención de las nuevas generaciones, las cuales están mucho más acostumbradas, sobre todo las urbanas, a consumir contenido multimedia, interactivo y personalizado.
“Se tienen que buscar formatos innovadores que mantengan el interés con la audiencia; esto implica la creación de plataformas digitales complementarias, la producción de contenido interactivo y la transmisión en vivo”, propuso.
Ahora la radio pública-educativa en estos tiempos enfrenta nuevos retos con el auge de la tecnología digital porque se ha transformado la forma en que consumimos medios y la coloca en un escenario de competencia digital con otras plataformas de información y entretenimiento: redes sociales, podcast y servicios de streaming.
Estos últimos ofrecen a las audiencias una gama bajo demanda, lo que deriva en que la radio tradicional, con su programación lineal, parezca “desfasada”.
Uno más que siempre lo ha sido para las radios públicas de México y el orbe, es la falta de financiamiento porque en gran medida dependen de los fondos gubernamentales o de organizaciones sin fines de lucro, abundó García Calderón.
En numerosos países los recortes en el gasto han afectado a los medios de comunicación públicos obligándolos a operar con presupuestos reducidos que los ponen en riesgo, y que también los colocan en desventaja de adecuarse a nuevas condiciones sin estar al día en términos tecnológicos, precisó.